«Creo que vamos a sentarlo en el banquillo de los acusados», comentó ayer la madre de la modelo que denunció por violación al príncipe saudí Al-Waleed bin Talal bin Abdul Aziz Al-Saud, en la cafetería del hotel de la Marina en el que se alojaron, una hora antes de la declaración de su hija en el juzgado. «No he dormido en toda la noche, estoy muy nerviosa», añadió la víctima.

A las 10 horas comenzó la comparecencia ante la jueza Carmen Martín, titular del Juzgado de Instrucción 3, en la que Soraya H. se ratificó en todos los términos de la denuncia presentada el 13 de agosto de 2008. «El príncipe no necesita defensa, ya la tiene de oficio, el fiscal, la declaración ha estado viciada, parecía el abogado de Al-Waleed», criticó uno de los letrados de Soraya H., Javier Beloqui. Este diario intentó ayer, sin éxito, contactar con el representante de la Fiscalía, Antonio Torres.

«La declaración no es digna de un fiscal que defienda los intereses de las víctimas de agresiones sexuales, ha sido un interrogatorio violento y agresivo», añadió Beloqui. Además, según el letrado, Torres manejó documentación de la Fiscalía alemana sin comunicarlo previamente a la defensa. Probablemente interpondrán un recurso por indefensión.

Soraya H., que ahora tiene 23 años, denunció en verano de 2008 al magnate saudí, que es uno de los hombres más ricos del mundo y es sobrino del rey Abdalá bin Abdelaziz. La de ayer fue su tercera declaración por esta causa. Ya explicó lo sucedido a un juez en Madrid y a otro en Alemania. La modelo sigue trabajando, sobre todo en España, Alemania e Italia. «Continúo mi carrera, no voy a dejarlo por esto, me va bien», comentó antes de la comparecencia. «Me da igual que sea millonario. Como si fuese panadero. Tiene que ser condenado», añadió.

Según la denuncia, un joven invitó a Soraya H. a una fiesta privada en la desaparecida discoteca El Divino. Alguien echó droga en su bebida. Lo siguiente que recuerda es que estaba en un camarote del yate de lujo ´Turama´, fondeado frente a la isla, con un hombre encima que estaba abusando de ella. La modelo identificó a Al-Waleed como su violador. Inicialmente el caso fue archivado. Los abogados de la modelo recurrieron y la Audiencia Provincial de Balears lo reabrió.

«Nos tratan como si fuésemos nosotros los agresores», se lamentó la víctima. «Tengo muy claro lo que pasó», añadió. «Es increíble que nos tengamos que desplazar a la isla para ratificar la denuncia, tres años y cuatro meses después», criticó la madre de la modelo, Susana H.. «Después de lo sucedido me plantearía denunciar una situación de violencia de género. El trato que da la Justicia española a la mujer es horrible. Este caso es como una película, irreal», añadió.

Dos pies iguales

Los abogados de Soraya H. creen que una de las fotos que aportó la oficina privada de Al-Waleed para demostrar que el 11 y el 12 de agosto de 2008 estaba en Cannes (Francia), está trucada. Según ellos, los pies de la esposa del príncipe parecen el mismo, copiado dos veces. «Todos los documentos aportados son de empleados o familiares de la realeza saudí», apuntó Susana H..

Madre e hija siguen veraneando en la isla. «El año pasado vi al joven que invitó a mi hija a la fiesta en El Divino trabajando en la Marina», comentó la madre, que mostró una foto como prueba. Sin embargo, no ha sido imputado en la causa. «Su exnovia contactó con mi hija en un chat y le dijo que la habían engañado», concluyó Susana H.