­Dos hombres, probablemente británicos, esperaron el lunes sobre las cuatro de la tarde a un compatriota, J. M. M. C, nacido en Liverpool y de 19 años, en el portal del bloque de apartamentos turísticos ubicado en el número 5 de la calle Holanda de Sant Antoni y le asestaron cinco puñaladas. La principal hipótesis que se baraja es que se tratase de un ajuste de cuentas entre pequeños narcotraficantes, según fuentes de la investigación.

El último parte médico facilitado ayer indicaba que J. M. M. C. seguía ingresado en planta en el hospital, estable dentro de la gravedad, y que evolucionaba favorablemente. Los médicos le colocaron un drenaje en el pulmón para evitar un neumotórax provocado por una de las puñaladas, que estaba controlado por el equipo de cirugía de Can Misses.

El Ib-Salut informó al juzgado de guardia de que el inglés había comunicado a los sanitarios su deseo de quitarse el drenaje y abandonar voluntariamente el hospital, lo que podría poner en peligro su vida.

La Policía Local de Sant Antoni recibió una llamada avisando del suceso y cuatro agentes se desplazaron hasta la calle Holanda sobre las cinco y media de la tarde del lunes. En un apartamento de la primera planta encontraron a cuatro jóvenes, el herido y tres amigos, todos británicos, que le estaban taponando las heridas con paños y toallas. «Han sido unos españoles», dijo en inglés J. M. M. C., en referencia a sus agresores, mientras no paraba de salir sangre de su cuerpo.

Sin embargo, la Policía y la Guardia Civil están buscando a dos jóvenes británicos que todavía no han sido detenidos. Serán acusados de una tentativa de homicidio cuando sean arrestados, según informaron ayer desde el instituto armado.

Una ambulancia tipo UVI móvil del 061 trasladó al herido al hospital Can Misses, puesto que había recibido cinco puñaladas, cuatro por la espalda y una de frente en la cara, bajo el ojo derecho. Cuatro fueron bastante superficiales y de poca profundidad menos una, que le atravesó un pulmón, según fuentes sanitarias.

Mientras tanto, los agentes locales registraron el apartamento que J. M. M. C., que estaba de vacaciones en la isla, compartía con sus amigos. La Policía Local encontró cuatro bolsitas que contenían 24 gramos de una sustancia que podría ser cocaína y una balanza de precisión. Sin embargo, uno de los ocupantes del piso explicó a los agentes que no era cocaína, sino ketamina.

La investigación

BUSCAN A DOS INGLESES

La Policía encontró en el piso 25 gramos de droga y una balanza

La Guardia Civil y la Policía de Sant Antoni buscan a dos británicos que podrían ser los agresores de su compatriota. En el piso encontraron 25 gramos de droga y una balanza.