­La suma de los salarios que las siete instituciones locales de las Pitiusas abonan a los cargos electos supera los 3,4 millones de euros brutos al año. Los dos consells y los cinco ayuntamientos pagan 3.442.076 euros anuales a presidentes, alcaldes, consellers y concejales, aunque esta cifra no incluye las dietas asignadas a la oposición en Formentera, con lo que la cifra será ligeramente mayor.

El Consell de Ibiza es la institución con un mayor gasto en cargos políticos, ya que paga anualmente 735.697 euros. En Formentera la cuantía de las nóminas de los políticos es de 576.000 euros, sin contabilizar el sueldo del presidente (que cobrará del Parlament balear) ni las dietas de los consellers de la oposición (todavía sin asignar). Vila paga más que Formentera, en concreto 599.462 euros. En el consistorio de Sant Antoni los pagos a políticos suman 460.800 euros, un poco más que lo que paga Sant Josep (422.500). En Santa Eulària el coste de los cargos elegidos en las urnas asciende a 551.723 euros y en Sant Joan los integrantes de la corporación perciben en su conjunto 95.894 euros anuales.

Vicent Marí, el alcalde de Santa Eulària, gobierna un municipio con 17.000 habitantes menos que Vila y gestiona un presupuesto 22 millones inferior, pero su sueldo supera en algo más de 600 euros al de la alcaldesa de Ibiza. El de Santa Eulària es el mejor pagado de todos los alcaldes (sin tener en cuenta que percibe además un complemento de antigüedad de 3.000 euros como funcionario municipal), pero en el último pleno de la localidad se empeñó en destacar que su equipo de gobierno cobraba menos que en la legislatura anterior, un hecho que no es del todo cierto. Marí y sus ediles mantienen el mismo salario que tenían antes de las elecciones del 22 de mayo, si bien es algo inferior al que percibían a comienzos del anterior mandato debido al recorte del 5 por ciento que se aplicó en 2010 a los sueldos públicos en todas las instituciones a consecuencia de los ajustes anticrisis. En el caso de Marí su sueldo pasó de 60.000 euros anuales a los actuales 56.994.

Marienna Sánchez-Jáuregui, a pesar de gobernar un municipio que reivindica su capitalidad, cobra un poco menos que su homólogo de Santa Eulària: 56.303 euros brutos anuales. Pepita Gutiérrez, la alcaldesa de Sant Antoni, se queda en el tercer puesto en el ranking, pese a su criticada subida salarial. Cobra 55.000 euros al año, exactamente la misma cantidad que habría percibido su antecesor, José Sala, de haber percibido una dedicación exclusiva en lugar de una parcial del 80 por ciento. El único alcalde socialista (Josep Marí Ribas), el de Sant Josep, es el que percibe la retribución más humilde (51.300 euros). El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Carraca, es en la práctica el mejor pagado de los políticos municipales (58.650 euros anuales), aunque su sueldo no lo abonará el Ayuntamiento, ya que ha renunciado a esta nómina y percibirá únicamente el salario de vicepresidente del Consell y conseller insular de Agricultura, Pesca y Cooperación Municipal, labor que compatibilizará con sus obligaciones al frente del municipio de Sant Joan.

Más ediles, menos dinero

Carraca puede presumir, y lo hace, de haber reducido casi un 50 por ciento las retribuciones de su equipo al pasar de una dedicación exclusiva y otra parcial que se abonaban en la legislatura 2007-2011 a una única dedicación exclusiva, la del concejal José Manuel Marí, que cobrará 40.742 euros al año, por debajo de los 79.000 que se invertían en sueldos en el periodo anterior. El resto de los ediles de Sant Joan cobran únicamente las dietas por asistencia a plenos y comisiones que ascienden a 383 euros mensuales. A pesar de que el incremento poblacional ha llevado a este municipio a tener dos nuevos concejales, el crecimiento de la Corporación no ha supuesto un aumento de los gastos. «En este Ayuntamiento no se pasan tíquets de gasolina ni de comidas», afirma el alcalde y conseller.

Todos los alcaldes de Ibiza cobran entre 50.000 y 60.000 euros, una cantidad que se ha convertido en límite invisible y que tampoco rebasa ningún conseller. Sí cobra más el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Serra, que percibirá 61.261 euros anuales, la misma cantidad que tenía asignada Tarrés. Serra cobrará como presidente y no como diputado autonómico (ambas retribuciones son incompatibles), aunque probablemente sí percibirá la dieta globalizada que reciben los parlamentarios y que asciende a 22.900 euros al año. La fórmula inversa ha escogido Jaume Ferrer, presidente del Consell de Formentera, que ha optado por el salario de diputado autonómico. Ferrer asegura no conocer aún la cuantía de la que será su nómina, ya que dependerá del número de comisiones de las que forme parte y de si ejercerá o no alguna portavocía. En cualquier caso, el promedio salarial de un diputado en el Parlament en la pasada legislatura era de 4.400 euros mensuales más dietas, con lo que probablemente Ferrer igualará o incluso rebasará la nómina de Vicent Serra, a pesar de que gestiona una institución con un tercio del presupuesto del Consell de Ibiza y de que Formentera tiene menos de 10.000 habitantes. El salario de Ferrer será en todo caso similar al abonado a otros diputados formenterenses en legislaturas anteriores.

En Formentera, menos

Sí hay una notable diferencia entre un conseller de Formentera y uno de Ibiza, los que tienen dedicación exclusiva en el equipo de Ferrer cobran unos 45.000 euros, 11.000 menos que los ibicencos en las mismas condiciones. Así, la diferencia salarial entre el presidente y sus consellers se acrecienta en el caso de Formentera, mientras que en el de Ibiza, Serra cobra 5.000 euros al año más que sus ocho consellers con dedicación exclusiva. En Santa Eulària, Marí percibe 10.000 euros más que sus concejales a tiempo completo.

Los consellers formenterenses e incluso el vicepresidente de la institución cobran menos que los concejales con dedicación exclusiva o los tenientes de alcalde de Vila o Santa Eulària. También existe una gran diferencia entre la exclusividad de un edil de Sant Antoni (33.000 euros anuales) y la de uno de Vila (47.430).

El número de consellers que ejercen su labor con dedicación exclusiva coincide en las dos islas (10 más el presidente), todos los del equipo de gobierno. Entre los consistorios, el que más ediles reúne con dedicación total es Vila con 7. Le siguen Santa Eulària con 6, Sant Josep con 5 y Sant Antoni con 4. A la cola, Sant Joan con un único edil con sueldo.