La propuesta que plantea la dirección de obra del proyecto del Parador turístico de Dalt Vila para reconstruir los arcos renacentistas del patio de la Casa del Governador sin afectar a los muros del templo de época romana desenterrado supondrá un «importante» incremento del coste, aunque aún se está trabajando en los cálculos y no se ha determinado la cuantía exacta. El sobrecoste se debe a que los cimientos de los pilares de los arcos se ubicarán a una profundidad de entre dos y cinco metros con respecto a los planes iniciales, lo que obligará a instalar muros de contención de tierra.
Los micropilotes instalados para sustentar los pilares de los arcos se insertaron, en dos puntos, en el muro del templo que se descubrió a posteriori. La Comisión Insular de Patrimonio (Ciotupha) exigió a Turespaña, promotora del proyecto, que presentase una alternativa para evitar el impacto sobre el hallazgo arqueológico, que, además, debe quedar visible. Las nuevas excavaciones arqueológicas han constatado que en el perímetro del muro hay zonas de roca, a mayor profundidad, en las que la constructora podrá apoyar los pilares sin afectar al templo.
La constructora explicó hace una semana esta propuesta a los miembros de la ponencia técnica de la Ciotupha en una visita que se hizo a las obras del Parador. En principio, esta alternativa satisface a los representantes de la Ciotupha, aunque aún no se ha presentado el proyecto en el Consell.
Para visualizar el templo romano, se instalará un forjado de vidrio sobre el suelo del patio de la Casa del Governador, aunque las fuentes consultadas explican que el proyecto que presentará Turespaña solo prevé ubicar este tipo de material transparente en los puntos en los que se puedan visualizar los restos del templo y no en toda la superficie de la zona.
Los hallazgos arqueológicos y el cambio de planes han provocado la ralentización del ritmo de las obras. Las fuentes consultadas niegan que se hayan paralizado los trabajos, aunque explican que se ha tenido que reajustar el plan de obras de este año a la reprogramación presupuestaria efectuada por Turespaña debido al sobrecoste provocado por las excavaciones.
Las mismas fuentes apuntan que este año se podría haber avanzado mucho más en la construcción si no se hubiera tenido que replantear la reconstrucción de la Casa del Governador como consecuencia de los hallazgos arqueológicos. De hecho, el plazo de ejecución del Parador marcado al inicio de las obras acaba en septiembre. Las fuentes consultadas aseguran que hasta que la Ciotupha apruebe los cambios que se han de incorporar para museizar los restos arqueológicos no se podrá planificar y concretar el final definitivo del proyecto.
Aparte del templo romano, en el patio de armas del Castillo los arqueólogos hallaron los restos de la antigua ciudad fenicia (de entre finales del siglo VII y principios del VI a.C.) que sustituyó al asentamiento de sa Caleta. Estas estructuras también serán visibles a través de un forjado de vidrio.
Pendientes del Consell
Turespaña presentará la nueva propuesta en un par de semanas
Los hallazgos arqueológicos han fozado la ralentización de las obras del Parador. En «un par de semanas», según las fuentes consultadas, se presentarán en el Consell para su aprobación los cambios en el proyecto para museizar los restos antiguos.
