­Un hombre que debe comparecer obligatoriamente en los juzgados los días 1 y 15 de cada mes fue sorprendido por los vigilantes de seguridad cuando pretendía acceder a la sede judicial de la avenida de Isidor Macabich con una porción «significativa» de hachís, informaron fuentes de este servicio.

Al parecer, este individuo entró en el edificio de los juzgados y al pasar su bandolera por el escáner los vigilantes detectaron que llevaba encima la sustancia estupefaciente.

Los trabajadores del servicio de seguridad identificaron entonces al hombre y comunicaron lo sucedido a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Entonces, se levantó acta por aprehensión de estupefacientes, una infracción que puede ser sancionada con el pago de alrededor de 600 euros, según las fuentes consultadas.

«El vigilante actuó en cumplimiento de la legislación de seguridad privada, que en su artículo 78 resalta que debe evitar el consumo y la tenencia de drogas en las instalaciones vigiladas por él», comentaron fuentes del citado servicio de los juzgados.

Este hombre es conocido entre la Policía y en los juzgados y precisamente ayer regresó en calidad de detenido a la sede judicial, aunque fue puesto en libertad después, según fuentes conocedoras de su situación.