Los negocios anexos al Hiper Centro de la carretera de Sant Antoni que quedaron arrasados por las llamas en la madrugada del pasado domingo no podrán reabrir antes del verano, de acuerdo con las estimaciones realizadas ayer por el director del centro comercial -propietario de los terrenos-, Martí Galmés.

«Aunque nadie ha hablado de fechas, hay un protocolo a seguir y mis cálculos son que antes del verano es muy complicado», resaltó Galmés, que indicó en que así se lo había trasladado a alguno de los propietarios de los negocios allí instalados.

Según el director de Hiper Centro, una vez que los peritos realicen sus informes y los trasladen a las aseguradoras, se les podrá autorizar para desescombrar. «Entonces inmediatamente iremos al Ayuntamiento [de Sant Antoni] con un nuevo proyecto» de reconstrucción, comentó Galmés, que apostilló que este deberá ajustarse a la ley, que «no es la misma de hace más de veinte años. Y luego habrá las demoras típicas de este tipo de obras», indicó.

«Va a ser un proceso largo», insistió Galmés, que apostilló que por parte de su empresa no tienen intención alguna en demorarlo. «Al revés; ya me gustaría a mí poder empezar la obra nueva mañana mismo, pero no podemos arrasar con todo y construir sin los permisos oportunos», señaló. En este sentido, indicó que la intención es que con el nuevo proyecto se siga «en la misma línea» que había en cuanto a los locales alquilados.

Por el momento, un perito acudió ayer a inspeccionar los locales afectados por el incendio con el fin de determinar y valorar los daños. Según Galmés, los propietarios de los negocios ni siquiera han podido acceder a sus locales para ver cómo quedó todo y qué se ha perdido. «Está prohibido entrar hasta que las compañías de seguros nos den los beneplácitos», dijo. Así, la zona quemada está vallada e incluso algunos días ha habido un vigilante de seguridad las 24 horas para evitar que alguien pueda acceder al interior, pues es «peligroso», comentó Galmés.