David Safier (Alemania, 1966) fue periodista y guionista de televisión (ganó un Emmy por la comedia ´Berlín, Berlín´) antes que escritor de éxito. De su primera novela, ´Maldito karma´, en la que una presentadora de televisión muere al caérsele encima el váter de la estación espacial, lleva vendidos más de cinco millones de ejemplares en todo el mundo y por el mismo camino va la segunda, ´Jesús me quiere´, en la que Formentera es el paraíso soñado –«como el de muchos alemanes»– de su protagonista.

—En su última novela su protagonista habla mucho sobre Formentera.

—Tengo que ser honesto, nunca he estado en Formentera. Pero es uno de los sitios favoritos ahora mismo por los alemanes para sus vacaciones. Es tan popular que hice que Marie planeara allí su luna de miel.

—Ahora que ha escrito sobre ella tendrá que venir.

—Iré. He estado en Mallorca, como casi todos los alemanes, dos veces. La primera me encantó y la otra no me gustó nada. Iré a España para la Feria del Libro de Madrid. Igual puedo escaparme.

—En ´Maldito karma´, la protagonista, Kim Lange, se reencarna una y otra vez y en ´Jesús me quiere´ Marie se enamora de Jesús. ¿Por qué siempre las religiones?

—Solo ha sido en estas dos. La tercera no tiene nada que ver con la religión. Fue por accidente. Cuando planeé escribir buscaba la idea adecuada, algo nuevo. Para la primera pensé que la reencarnación era algo fresco. Para la segunda primero pensé en tres princesas que venían a nuestro mundo desde sus cuentos de hadas, pero cinco meses después de tener esa idea se presentó la película de Disney ´Encantada´, así que eché mano de las otras ideas que tenía. Una de ellas era una comedia romántica con Jesús. Nadie lo había hecho. No es que buscara algo que tuviera relación con la religión, fueron las primeras ideas que me gustaron.

—Tras de las religiones, Shakespeare.

—Sí. ´De repente, Shakespeare´, que está a punto de editarse en España, es sobre una mujer que se despierta en el cuerpo del escritor y solo podrá volver a nuestro tiempo cuando encuentre el significado del amor verdadero. Ella y Shakespeare, que comparten cuerpo, viven un montón de aventuras en la Inglaterra isabelina, duelos, amor, drama… Es como una comedia de Shakespeare.

—¿Es posible encontrar el significado del amor verdadero?

—No podría regresar si no fuera posible. Parece que lo encuentra, ella está convencida de que es así, pero no regresa al siglo XXI, así que es consciente de que no era amor verdadero y en el momento final lo descubre.

—¿Por qué sus protagonistas son siempre mujeres? ¿Somos más interesantes?

—[Ríe] Es que las mujeres hablan mejor que los hombres sobre sus sentimientos. Creo que hombres y mujeres, y sé que es una afirmación muy impopular, son diferentes. Los hombres tenemos sentimientos, lo que sorprende a muchas mujeres, pero no somos capaces de hablar sobre ellos. Me resulta más fácil escribir sobre mujeres porque ellas dicen «podría haber empezado a llorar», «quería matarle» y cosas así. Prefiero trabajar desde el punto de vista de la mujer.

—En ´Jesús me quiere´ Jesús parece uno de los Bee Gees y el diablo es George Clooney ¿No es una batalla perdida?

—¿No se supone que lo importante está en el interior? ¿No importa la persona, el carácter? [Ríe] Es un truco del diablo. Si puedes tener el aspecto de cualquier persona, ¿cómo no vas a elegir a George Clooney? Yo lo haría.

—Periodista, guionista de series con Emmy y escritor. ¿Con qué se queda?

—Ya he escogido. Escribo novelas y he dejado el periodismo y la televisión. Espero poder seguir así.

—¿Alguna vez imaginó que podría vivir de sus novelas?

—Nunca. Jamás. Era algo con lo que soñaba a los 17 años. Pero a esa edad tienes que decidir si estudias o trabajas en un banco. Quería escribir, pero no tuve el coraje de decirlo. Si tienes 17 años y dices en casa que quieres ser novelista no es la decisión que aplauden. Nadie te dice que es una buena idea y que apuestes por ella. Así que escogí el periodismo, pero mi novia, ahora mi mujer, se quedó embarazada. En nueve meses tenía que hacerme cargo de una familia, me fui a la televisión y tuve la fortuna de ganar un Emmy. Cuando empecé con las novelas ya era un exitoso guionista en Alemania. Pensé que si podía escribir una cada año o cada dos… Cuando hablé con mi editor sobre ´Maldito karma´ me dijo que si pudiera vender entre 12.000 y 15.000 copias sería fantástico. Ahora tengo tres libros. He vendido cinco millones y la primera tirada de la última novela ha sido de 250.000 ejemplares. No lo hubiera imaginado nunca.

—Después de años como periodista, escribiendo lo que ve y lo que oye, ¿le resulta difícil escribir tirando de imaginación?

—No, me encanta. En periodismo no escoges a las personas que conoces y no las hubieras conocido nunca si no fuera por el trabajo. Es lo que más me gusta del periodismo. Sentarme y dejar a la imaginación volar libre, sin ataduras como en el periodismo y sin pensar en la producción como en la televisión es fantástico. Las cosas pueden explotar, un pato se puede transformar en George Clooney y ser el demonio. Es genial, pero no se lo recomiendo a todos los periodistas porque estás seis, siete u ocho horas totalmente solo. Te tiene que gustar.

—Pero se debe reír escribiendo.

—Sí. El sentido del humor es imprescindible. Escribo para entretener, para hacer reír a la gente. Hay gente que lo entiende, que sabe leer un libro, reírse y ya está, pero otros piensan que deben tener un mensaje. Si quieres pensar sobre Jesús, las religiones, sentido de la vida, la reencarnación también puedes hacerlo. O no. Si estas historias no tuvieran sentido del humor serían como rezar.

—¿Es posible reírse de todo?

—Mi intención nunca ha sido desacreditar a las religiones. Cada uno tiene su límite entre algo gracioso y algo de mal gusto. Yo nunca haría humor, por ejemplo, de los abusos de curas a niños, pero seguro que hay gente que considerará de mal gusto que el diablo sea George Clooney.

—¿Escribiría una novela seria?

—Es más fácil escribir sin humor. Para cualquier historia tienes que crear personajes, una trama, la acción y la parte emocional. En una novela cómica debes crear todo esto y, además, conseguir que la gente se ría. Hacer bromas en cada página. Es mucho más difícil. Hay historias que quiero contar y que son dramáticas. Las haré pero no son tan complicadas.

—¿Qué está escribiendo?

—Mi cuarta novela: ´Happy Family´.

—Conociendo los precedentes, seguro que no es tan feliz.

—[Ríe] ¿Cómo lo has adivinado?

—Se está rodando ´Jesús me quiere´. Dígame que sale George Clooney.

—Me temo que no. Van a tener que ser muy imaginativos para resolver el tema del diablo. Hubiera sido fantástico que Clooney hiciera el papel. ¿Ves las diferencias entre la imaginación del novelista y las posibilidades del director de cine?