El templo romano descubierto en el Castillo durante las obras de construcción del Parador tiene una longitud máxima de 16,1 metros y una anchura de 5,8 metros, que aumenta hasta los 8,8 metros si se suma el espacio que ocupan la gradas laterales, que tienen 1,5 metros por cada lado. El informe arqueológico entregado al Consell de Ibiza señala que el área de uso de este edificio era de unos 62 metros cuadrados.

Dos de los cinco pilares que han de sostener el patio interior de la Casa del Gobernador afectan a parte de los muros de esta estructura. En las imágenes a las que ha tenido acceso este diario se puede ver como algunos de los micropilotes instalados para sujetar la estructura del patio han quedado insertados dentro de parte de las paredes de piedra.

Turespaña decidió suspender en noviembre la excavación arqueológica a la espera de que el Consell decida si el proyecto puede seguir adelante tal como se había previsto o si se debe cambiar. Turespaña defiende ante el Consell que la construcción del patio interior, en el que se debe reconstruir el doble arco de época renacentista y otros ornamentos arquitectónicos que en su día fueron derribados, es compatible con la conservación y museización de la planta del templo.

El informe arqueológico apunta que la excavación no ha llegado hasta el pavimento o nivel de uso; es decir, del suelo del edificio. Los arqueólogos consideran que cabe la posibilidad de que el suelo interior estuviera elevado con respecto a la cota del suelo exterior, aunque también apuntan que es muy probable que algunas de los compartimentaciones que crean los muros desenterrados (dividen el espacio en tres naves transversales) tengan un pavimento a una cota inferior a modo de semisótano.

A partir de los restos de cerámica que se han hallado en el relleno en el que se apoya por el exterior el tramo inferior de la grada, los expertos sostienen que el edificio pudo utilizarse entre finales del siglo I a. C. e inicios del I d. C. Por ahora, y a la espera de que el Consell resuelva si se debe seguir excavando el yacimiento, el informe de los arqueólogos apunta que el templo era un edificio de carácter público, con una función religiosa o bien administrativa. El mismo informe señala que los objetos o restos arquitectónicos que se pudieran desenterrar podrían ayudar a conocer las características de los compartimentos interiores, su cronología más exacta y su funcionalidad.

Aljibes y canalizaciones

El área de excavación abarca un espacio de 125,8 metros, en la que, además, han salido estructuras de época moderna (después de la Edad Media), entre las que destacan dos aljibes en los que desembocan sendos trazados sinuosos y fondos convexos. Las construcciones de época moderna también cubren y cortan varios estratos de relleno y algunos muros probablemente de época almohade. Todas las estructuras se superponían. En uno de los rellenos se ha hallado cerámica de los siglos XII y XIII.

En el sótano de la antigua Casa del Gobernador se ha excavado un área de casi 42 metros cuadrados, en la que se han hallado diferentes construcciones fenicias de entre finales del siglo VII y mediados del VI a. C. Se trataría de los restos del origen de la ciudad de Vila después de que los fenicios abandonaran el poblado de sa Caleta. En el patio de armas se ha desenterrado otra parte más amplia de la arquitectura fenicia, un descubrimiento excepcional, según los arqueólogos. También se ha hallado una estancia a la que se accede a través de unos escalones de origen púnico. En el sótano se han hallado estratos de arcilla rojiza de cronología púnica, en la que se ha filtrado una gran cantidad de cemento líquido.