El turismo dejó en las islas de Ibiza y Formentera un total de 96,8 millones de euros durante el mes de octubre, según figura en la Nota de Coyuntura Turística de Balears correspondiente a esta mensualidad, dada a conocer ayer por el Govern.
Esta cifra de la estadística, aunque alejada de los 1.069 millones de euros que cosechó la industria turística entre junio y agosto, demuestra a juicio de los responsables de la conselleria de Turismo la favorable evolución de la temporada.
El gasto medio diario de los turistas en las Pitiusas fue de 94,5 euros el mes pasado, cifra que se sitúa ligeramente por debajo de los 94,74 euros de la isla de Menorca y que es notablemente inferior a los 100 euros por día y turista de Mallorca.
El número total de visitantes en el mes de octubre, que marca el final de la temporada, fue de 103.391 turistas en Ibiza y Formentera, frente a los 41.000 de Menorca o los 654.000 de Mallorca.
Estos visitantes generaron un total de 1.024.503 pernoctaciones, con una estancia media de 9,9 días, sensiblemente superior a los 8,8 días que se registraron durante los tres meses más fuertes de la temporada estival.
A tenor del estudio divulgado ayer por el Govern balear, la estancia media de los turistas registrada en Ibiza y Formentera durante el mes de octubre fue la más alta de Balears, puesto que en Menorca no pasó de los 9,4 días y en Mallorca se quedó en únicamente 8 jornadas de permanencia en la isla.
Aumento del gasto
El director general de Planificación Estratégica del Govern, Llorenç Pou, valoró el aumento del gasto turístico del 12,2% producido en el conjunto de Balears en octubre, en relación al mismo mes de 2009, y dijo que constituye «el incremento más importante desde 2004».
Pou subrayó que no se trata de un dato aislado, «sino que se produce por cuarto mes consecutivo y fija una tendencia favorable».
La consellera de Turismo y Trabajo, Joana Barceló, también destacó que el crecimiento es superior al 5,3% de media nacional e insistió en que consolida el cambio de tendencia detectado en Balears a partir de junio tras un arranque de año difícil.
«A partir de junio, los datos de gasto turístico y llegadas se van poniendo en positivo, llegando incluso a compensar los seis primeros meses del año», afirmó Barceló.
La consellera ha advertido sin embargo de «la dureza de la estacionalidad» de la actividad turística que reflejan los datos. «Es necesario que seamos capaces de romper [la estacionalidad] para rentabilizar mucho más nuestras infraestructuras turísticas».
