La salida de Miquel Ramon del equipo de gobierno del Consell puede no ser la última, pese a que éste haya pedido a sus dos compañeros que no dimitan. El conseller Albert Prats asegura que la relación con el PSOE está «muy herida» y que, en función de «cómo evolucione» no «se cierran las puertas» a su salida del gobierno.

Prats asegura estar «abatido» con la renuncia de Miquel Ramon, del que destaca «su constancia y las horas que dedica al trabajo». «No todos lo hacen», advierte. Dice que por responsabilidad no provocarán inestabilidad en el Consell pero ExC será «más dura» y no cederá para que haya «un buen entendimiento».

Los consellers de ExC que siguen en el equipo de gobierno, Albert Prats y Marga Torres, se encuentran «muy heridos» por las consecuencias de la crisis del Plan Territorial (PTE) que, de momento, se ha saldado con la dimisión de Miquel Ramon, y no descartan seguir su camino, según explica Prats, en función de «cómo se desarrolle la relación en el Consell y del respeto que muestre a partir de ahora el presidente con sus socios de gobierno». «Si inicia un camino de imposiciones, ExC no lo asumirá», advierte Prats, que no tiene reparo alguno en criticar la actitud del presidente.

El conseller de Medio Ambiente y Movilidad asegura que, pese a que la coordinadora de ExC ha decidido que nadie se mueva, también pensó seguir los pasos de su compañero y abandonar el equipo de gobierno. De hecho, en una entrevista a este diario del pasado 16 de mayo Prats declaró que en el caso de que Miquel Ramon saliera de la institución, algo que dijo que no pensaba que ocurriese, «por solidaridad lo acompañaría en su suerte».

Eso sucedió después de que el presidente Tarrés desautorizara públicamente a Ramon y descartara, en contra de lo asegurado por el conseller, que la aprobación inicial del PTE se iba a llevar a pleno a finales de mayo.

Prats explicó ayer, aunque «suene a excusa», que no se trata de «la misma situación» porque, en ese caso, reveló, «se cernía una amenaza de destitución impuesta sobre el conseller». «Por eso advertí de que yo le acompañaría en su suerte en el caso de que pasara algo», dijo el conseller, que insiste en que las condiciones de ahora son otras: «El conseller ha decidido marcharse, pero no se le ha impuesto. Entonces lo dije para que no se produjera la destitución».

El conseller apunta que «las voces» que reclaman su marcha son de la derecha, por lo que entiende que «no sería inteligente hacerles caso», sobre todo porque «ellos no han dado ejemplo cuando han podido».

De la misma manera, Prats defiende la posición de la coordinadora de ExC en el hecho de que están pendientes proyectos importantes, como, en su caso, las actuaciones previstas para recuperar ses Feixes, con una partida, que está a punto de llegar procedente de Madrid, de casi dos millones de euros.

En este sentido, el conseller aclara que «no todo el equipo de gobierno piensa que se haya de invertir en ses Feixes». «Es un proyecto muy representativo de nuestra base y si desaparecemos es posible que quede en nada porque ha habido una lucha interna por cómo se tenían que destinar los recursos en cada caso. Por eso hay que seguir», reitera, a la espera, eso sí, de ver «cómo evolucionan las cosas».

2.000.000 € para ses Feixes

El conseller explica que están a punto de llegar casi dos millones para ses Feixes, lo cual es un motivo para no dimitir porque «no todo el equipo de gobierno piensa que haya que invertir en el humedal».