«Es una cifra que nos remite al 2012, es el comienzo de un cambio positivo, de una nueva vida, de una nueva conciencia», explicó ayer en el agroturismo Atzaró Ilona Pantel Ayal. A las 10.10 horas del 10 de octubre (mes diez) de 2010 comenzó el ´Healing Ibiza´, «un evento holístico benéfico para cuerpo, mente y alma» que se hizo coincidir con la celebración del Día Mundial de la Interconexión.
«La cifra es lo de menos, de hecho el calendario maya habla del 2012 pero el cambio positivo ya ha empezado», añadió Pantel, una de las organizadoras del evento. Esta alemana conoció en Perú a una suiza y comenzó a interesarse por la «conciencia positiva». «No estamos en contra de las fiestas pero queremos que la gente conozca que hay otra Ibiza», añadió.
Muchas personas se aproximaron ayer a este estilo de vida. Niños y mayores disfrutaron de terapias gratis de yoga, reiki, meditación, masajes, etc. Además, los asistentes tomaron zumos naturales y comida sana, escucharon música en directo, bailaron y particparon en diversos espectáculos.
Al evento asistió gente de todas las nacionalidades, la mayoría extranjeros, sobre todo británicos y alemanes. Muchos lo hicieron acompañados de sus hijos.
El formenterés Ángel Márquez y la alemana Maureen Ji tienen desde hace años un proyecto común: dar de alta de forma oficial la Fundación Samasound, creada para ayudar a los niños huérfanos o con problemas de la isla.
Ji, que toca desde hace años el sitar indio en Cas Serres para animar a los ancianos, viajó a China con una amiga británica. Allí se dio cuenta de la necesidad de ayudar a los niños. Además, decidió aplicar en la isla las técnicas de meditación de Oriente Medio (el Sama). «Hemos encontrado muchos problemas burocráticos, no tenemos tiempo para el papeleo y necesitamos alguien que se encargue del dinero, yo lo que quiero es tocar para los niños», comentó ayer Ji.
Márquez y Ji se conocieron y juntos decidieron poner en marcha la Fundación Samasound. Para ello, Márquez dispone de una casa en Sant Llorenç que puede servir de sede.
Por el momento, ayudan a casi doce niños de hasta ocho años que se han quedado huérfanos o que tienen problemas de arraigo familiar. Seis de ellos jugaban ayer en los talleres organizados por el ´Healing Ibiza´. Además, otros niños se sumaron a la fiesta y todos dibujaron, rieron y disfrutaron de una jornada en la que el tiempo acompañó en la mayor parte del día, tras las tormentas caídas de madrugada.
Donativo de cinco euros
Todos los asistentes al evento, excepto los menores de doce años, colaboraron con un donativo de cinco euros. La recaudación puede ser el impulso definitivo para poner en marcha la Fundación Samasound, según explicaron sus promotores. «No hace falta irse lejos, en Ibiza hay niños que necesitan ayuda», recordó una de las organizadoras, Ilona Pantel.
Mientras tanto, los asistentes disfrutaron de clases grupales de yoga, masajes tipo reiki o de reflexología, todo gratis.
En los jardines los mensajes escritos fueron positivos: «Ser feliz es una decisión»; «conócete, ámate, sé tú mismo»; «tengo paz», entre otros muchos.
