Un gran fogonazo que iluminó el cielo y también la superficie terrestre durante una breve fracción de tiempo fue contemplado anteanoche en varios puntos de las Pitiusas, según informaron distintos testigos a este periódico.

El fenómeno, parecido al de un pequeño relámpago, iluminó con una luz blancoazulada los edificios y el suelo durante un segundo o dos. El hecho tuvo lugar en torno a las once y media de la noche del sábado. Algunos testigos aseguran que se trató de una «gran estrella fugaz» que atravesó el cielo.

Un portavoz de la Agrupación Astronómica de Ibiza consultado por este periódico explicaron que pudo tratarse de un gran metorito o bólido –roca procedente del espacio exterior que atraviesa la atmósfera y se incendia a su contacto– "de algunos kilos de peso".

Habitualmente, las estrellas fugaces son provocadas por la entrada en la atmósfera de pequeñas partículas de polvo o minúsculas piedras que se desintegran a los pocos segundos de quemarse en la atmósfera. Los bólidos consisten en el mismo fenómeno, pero con piedras de mayor tamaño y efectos visuales más espectaculares, como habría sido este caso.