Son las doce del medio día y Paula Crespo, miembro de la Associació Balear d´Alletament Matern (ABAM) en Ibiza, centra la atención de los numerosos asistentes a la fiesta de inicio de la Semana Mundial de la Lactancia Materna 2010.

Está al frente de uno de los talleres con más éxito: el de portabebés de tela, que siguen con especial interés dos mujeres embarazadas. "Con este sistema se garantiza una posición natural para el correcto desarrollo y crecimiento del bebé, mientras que los industriales pueden ser muy perjudiciales", explica Paula mientras va a anudando en torno al cuerpo la tela que sostendrá al pequeño. En un segundo plano, un papá con su hijo en el carrito pone en duda la seguridad de este sistema: "A mí se me cae fijo", dice. La monitora destierra temores: "Es seguro, el niño va muy bien sujeto".

Ya sea de tipo bandolera elástica, fular o los más exóticos mei tai, onbuhimo o podaegi, esta asociación defiende a ultranza sus virtudes. "Promueven el apego y el contacto, son más saludables para el pequeño y favorecen la lactancia porque sostienen al bebé y dejan las manos libres a la madre", explica la monitora.

Talleres de danza y fisioterapia

La convocatoria resultó un éxito de asistencia, con más de un centenar de personas en el espacio habilitado en Vara de Rey, y muchas madres aprovecharon no solo para mostrar su preferencia por la lactancia materna, amamantando a sus hijos en público, sino también para participar en los talleres de recuperación del suelo pélvico, a cargo Ester Serra, y en el de danza del vientre, de Lili Monsalve.

Thaïs Puig, portavoz de ABAMEivissa recordó que la fiesta de la lactancia se celebra en la isla desde hace cuatro años "con el objetivo de informar sobre la lactancia materna".

El lema de este año es ´Paso a paso hacia la humanización de la lactancia y el parto´ ya que una de las labores de la asociación es "reclamar que el sistema sanitario público ofrezca a las madres la posibilidad de que su parto sea lo más natural posible si así lo desean", explica Puig. "Queremos un verdadero compromiso por parte de la gerencia de Can Misses para que se plasme por escrito un protocolo en este sentido, actualizado y al alcance de las madres porque tienen derecho por ley a saber cómo van a ser tratadas y cuál es la política del hospital para poder tomar decisiones", remarca la portavoz de la agrupación.