El fenómeno conocido como balconing no se ha cobrado ninguna vida este año en Ibiza. Dos hombres han fallecido en verano en la isla después de caer desde terrazas de hoteles, aunque se trató de sendos suicidios, uno confirmado oficialmente.

El 5 de julio de madrugada un hombre falleció al precipitarse desde un tercer piso de unos apartamentos de Sant Antoni. Se suicidó tras una discusión con su novia y con un amigo, según explicó posteriormente el concejal de Gobernación del Ayuntamiento, José Ramón Serra, Pilot.

El domingo pasado un joven italiano murió al precipitarse desde un séptimo piso en el hotel Playa d´en Bossa. Todos los indicios apuntan a un suicidio por motivos sentimentales, según la investigación de la Guardia Civil y las declaraciones de varios testigos y de empleados del establecimiento hotelero.

Sin embargo, varios medios digitales y televisiones nacionales e internacionales hablaron de un nuevo caso de ´balconing´.

Solo algunos periodistas italianos contactaron con los medios de comunicación locales para contrastar la información.

Tres precipitados el mismo día

Desde hace años son muchos los jóvenes turistas que han fallecido en Ibiza al precipitarse desde los balcones o terrazas de sus apartamentos. El 9 de agosto de este año se produjo una fatal coincidencia: tres jóvenes turistas, todos británicos, resultaron heridos de gravedad al saltar desde los balcones de los hoteles en los que estaban alojados, uno en Platja d´en Bossa y dos en Magaluf (Mallorca). Al día siguiente aparecieron vídeos colgados en YouTube en los que se podía ver a jóvenes pasando de balcón a balcón y saltando a las piscinas de los hoteles.

El balconing se define, según los medios de comunicación, como el intento de jóvenes turistas, casi todos extranjeros (sobre todo británicos), de saltar a la piscina de los hoteles o pasar de balcón a balcón cuando se encuentran bajo los efectos del alcohol o de las sustancias estupefacientes.

Esta terrible combinación ha llevado al menos a seis turistas a practicar el balconing este año en Ibiza. El 26 de mayo un hombre de 25 años, nacido en el Reino Unido, se precipitó desde un tercer piso cuando supuestamente intentaba alcanzar la piscina de los apartamentos Jet de Platja d´en Bossa. El 2 de agosto otro joven, también británico, resultó herido muy grave al caer desde un tercer piso en unos apartamentos de Sant Antoni.

Otro turista británico, de solo 20 años, cayó de un segundo piso en los apartamentos Jet el 9 de agosto. Según sus amigos, había mezclado alcohol, éxtasis y cristal. Cinco días más tarde un australiano de 23 años se rompió un tobillo al caer desde primer piso en un hostal de Sant Antoni.

El 18 de agosto otro hombre, el único español de este recuento, se cayó desde un primer piso en unos apartamentos de Platja d´en Bossa. Dos días después otro joven británico resultó herido, en un claro caso de ´balconing´, ya que intentó lanzarse a la piscina desde el segundo piso de un hotel de Cala de Bou, según informó la Policía Local de Sant Josep y la Guardia Civil. Se golpeó contra el fondo de la piscina.

¿Qué es el balconing?

Los medios de comunicación definen el balconing como el salto que hacen jóvenes turistas, casi todos extranjeros (sobre todo británicos) desde balcones o terrazas de hoteles para alcanzar la piscina. En muchos casos están bebidos o drogados.