El presidente del Consell, Xico Tarrés, y la consellera de Política Patrimonial, Marga Torres, presentaron ayer la finalización de las obras que han permitido cubrir el yacimiento arqueológico situado en el número 12 de la calle sa Capelleta, donde está previsto que antes de que acabe este año concluya la fase de museización del futuro centro de interpretación. El edificio (presupuestado en 281.000 euros y obra del arquitecto Pere Roig) que cubre los restos de las épocas púnica, romana y árabe es una estructura móvil que en el futuro podrá adaptarse a ampliaciones si se hallan nuevos restos en las zonas colindantes, como un solar con naranjos y algarrobos que hay a su lado y en el que, con toda probabilidad, continúa alguna de las estructuras destapadas por la obra.

El centro de interpretación, en el que se instalarán vitrinas con los restos más representativos, dispone de una pasarela que recorre en toda su longitud la zona excavada, así como de dos escaleras que dan acceso al suelo.

Marga Torres destacó que una de las características del edificio es que está construido de tal manera que «lo que más destaca no es su estructura, sino los restos arqueológicos». Tarrés subrayó la relevancia del lugar donde está enclavado, a medio camino entre la acrópolis de Dalt Vila y la necrópolis de Puig des Molins: «Confío en que no vengan aquí solo las escuelas», dijo con su habitual sorna.

Un nivel para cada época

Los responsables de la museización marcarán sobre las paredes a qué época corresponde cada nivel: púnico, romano y árabe. Quienes visiten el yacimiento observarán una calle, amplia para la época romana, que lo recorre longitudinalmente. A ambos lados se distinguen tres casas, de las cuales una es la más completa y grande. En ésta se puede observar la estancia principal y su acceso al patio, en torno al cual se hallaba el resto de habitaciones de la mansión. En ese vial se aprecian dos pozos negros, a donde iban a parar las aguas residuales de las letrinas de esa vivienda.

Durante la excavación hallaron las piedras de marès que formaban parte de la puerta principal de esa casa y que el Consell desea reconstruir completamente.

José María López Garí, director insular de Patrimonio del Consell, explicó que el yacimiento es, en estos momentos, «un caos» a la hora de interpretar a qué época corresponde cada estructura, pero la museización permitirá dar a conocer de forma didáctica ese y otros aspectos de la excavación, en la que, por ejemplo, fue hallada la tumba de una niña en cuyo interior, además, se conservaban las cáscaras de dos huevos de gallina, una especie de ofrenda.

Un gallinero en un horno

También encontraron un gallinero construido dentro de un horno de asar pan de la época musulmana que había sido abandonado. En los pozos negros, para uno de los cuales se aprovechó una estructura púnica previa, rescataron restos de peces y semillas de sandía, higos y melones, que dan una idea de la alimentación de los habitantes de esa época, en la que existía una estructura de las calles muy organizada, según Garí.

Todo el barrio que había en esa zona fue destruido de manera violenta y desde la época de la conquista catalana se utilizó, hasta avanzado el siglo XX, como área de cultivo.

En la vivienda más grande del solar existe un doble muro, señal, según López Garí, de que al lado había otra. Justo junto al muro que separa esa excavación de la finca colindante en la que hay plantados varios árboles frutales existe un pozo romano de ocho metros de longitud que data del siglo I. Los arqueólogos comprobaron que los romanos excavaron sobre él, una vez cegado y un siglo más tarde, una tumba.

Bajo la parte de la pasarela acristalada, los visitantes podrán ver un santuario púnico y, además, una tumba romana y un muro árabe.

1 millón de euros

costará en total la adquisición del solar, la construcción del centro y su futura museización, según Xico Tarrés.

Antes de fin de año

Los responsables del Consell confían en que el centro de interpretación se pueda abrir antes de que acabe el año. El proyecto contempla un recorrido por este yacimiento.