El teniente coronel Fernando Delgado, jefe del 801 Escuadrón del Ejército del Aire, que tiene a su cargo la base del servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR) de Mallorca, fue arrestado ayer por su responsabilidad en la movilización de aparatos militares que se llevó a cabo el pasado fin de semana para trasladar a Ibiza y a Formentera a parte de los invitados a la boda de un teniente del SAR que se celebró el pasado fin de semana en Formentera. También permanece bajo arresto el piloto del helicóptero que intervino en los traslados, según confirmaron ayer fuentes gubernamentales.

A raíz de las revelaciones efectuadas por Diario de Ibiza, el Estado Mayor del Aire abrió una investigación que considera acreditado que se emplearon «indebidamente» un helicóptero HD-19 Puma y un avión C-212 Aviocar, ambos del SAR, e investiga si lo mismo ocurrió con un tercer aparato, un CN-235 que, según testigos presenciales, también intervino en el dispositivo.

Una portavoz del Ministerio de Defensa no quiso confirmar ni desmentir que uno de los arrestados sea el jefe al mando del SAR en Balears, el teniente coronel Fernando Delgado, aunque señaló que la investigación del Ejército del Aire «está apuntando a los máximos responsables» de unos hechos que el Ministerio considera «graves». También consideró probable que las posibles responsabilidades «terminen en Palma», entre los mandos de la base de Son Sant Joan y no descartaron nuevas medidas disciplinarias.

Fuentes de Defensa comentaron la relativa «facilidad» con que puede moverse un helicóptero, que no requiere de una pista de aterrizaje, mientras que se considera que, para desplazar un avión tuvo que intervenir necesariamente algún mando, lo que dejaría un rastro que reconstruirá la investigación «exhaustiva» ordenada para esclarecer estos hechos.

Al ser informado de este caso, el jefe de la Fuerza Aérea, general José Jiménez Ruiz, abandonó un acto al que asistía en Villaviciosa de Odón para coordinar la investigación ordenada por el Estado Mayor del Ejército del Aire y por el teniente general jefe del Mando Aéreo General, Fernando Lens, que envió a Mallorca a un agente instructor.

Fuentes militares explicaron que el jefe del SAR en Mallorca fue arrestado por ser el superior de quienes utilizaron aeronaves militares en una boda, aunque desde la base del SAR se asegura que Delgado también viajó a Formentera como invitado a la boda. El propio jefe del Escuadrón eludió la cuestión al ser preguntado sobre este punto: «Los hechos se están investigando», fue su única respuesta.

El Ministerio de Defensa reiteró ayer que las pruebas de la presencia de los aparatos militares en Ibiza aportadas por Diario de Ibiza –fotos realizadas por personas que presenciaron las evoluciones del Puma en Formentera e imágenes de uno de los aviones obtenidas por spotters en el aeropuerto de Ibiza– han sido claves para demostrar unos hechos que responsables del Ministerio califican como «una barbaridad».

El coste de las operaciones efectuadas por los tres aparatos militares para transportar invitados a la boda de Formentera puede superar los 23.000 euros, calculados en base al gasto de combustible, la parte proporcional del mantenimiento y la amortización de los aparatos, estimados según precios estipulados por Defensa.

El escuadrón del servicio de Búsqueda y Salvamento con base en Palma, al que está adscrito el contrayente, movilizó un avión C-212 Aviocar y un CN-235. Ambos volaron unas 4 horas trasladando invitados de Mallorca a Ibiza, lo que supone 8.944 euros, según sendas órdenes ministeriales de 2008, a razón de 1.800 euros por hora de vuelo del Aviocar y 2.236 euros para el segundo de los aviones.

También intervino un helicóptero HD-19 Puma, que se desplazó de Mallorca a Ibiza y después realizó ocho trayectos entre el aeropuerto de Ibiza y la zona de es Ca Marí en la que tomó tierra en Formentera. En total, este aparato pudo volar unas seis horas, lo que supone un coste estimado de 15.000 euros, según el coste de la hora de vuelo fijado por Defensa, cifrado en 2.500 euros, si bien empresas del sector aeronáutico poseedoras del mismo modelo de aparato en su versión civil elevaron los costes a unos 3.500 euros por hora de vuelo.

En el modelo del SAR el importe podría ser algo más alto al tratarse de un modelo más pesado y con un mayor consumo de combustible. Las mismas fuentes explicaron que los aparatos de ala flexible –helicópteros– requieren un mantenimiento mayor que los de ala rígida –aviones–, que ahorran carburantes por su capacidad de planear.

Testimonios gráficos

Fuentes gubernamentales comentaron la abundancia de imágenes que se han recibido de ciudadanos alarmados por la presencia del helicóptero del SAR en Formentera.