La boda en Formentera de un teniente del Ejército del Aire no movilizó únicamente a un helicóptero del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR) con base en Palma, sino que en el traslado de invitados participaron también dos aviones de transporte ligero, que llevaron a varios grupos hasta el aeropuerto de Ibiza y posteriormente los recogieron para regresar a sus lugares de origen. El Ministerio de Defensa admitió ayer oficialmente que se había producido un «uso indebido» del helicóptero y que se había abierto un expediente disciplinario a los responsables. Sin embargo, el portavoz de Defensa no pudo comentar nada acerca de la utilización de los dos aviones porque no tenía ningúna noticia de ello hasta que se la trasladó Diario de Ibiza.

Los aterrizajes y despegues del helicóptero en Formentera, en esta especie de puente aéreo organizado para los invitados a la boda del oficial del SAR, llamaron mucho la atención en la isla y provocaron incluso la actuación de una patrulla de la Guardia Civil y una petición formal de información por parte del presidente del Consell Insular, dado lo inusual del lugar elegido para las operaciones, en la zona de es Ca Marí, junto a la playa de Migjorn y muy cerca del establecimiento en el que se alojaron muchos invitados y en el que se ofreció el banquete nupcial.

La participación de los aviones fue mucho más discreta, pero a pesar del abundante tráfico aéreo que se registraba en el aeródromo durante el fin de semana no pasó inadvertida para algunos empleados de la terminal ibicenca ni para los aficionados al avistamiento de aviones, los denominados spotters, que fotografiaron las llegadas y despegues de los vuelos, tanto el sábado 24 de mayo como el domingo 25, hasta en cuatro ocasiones. En las imágenes facilitadas por uno de ellos se aprecia el despegue de un C-212 Aviocar (con capacidad para 26 pasajeros, según el Ministerio de Defensa) también perteneciente al SAR de Palma.

Según el relato de este spotter, un grupo de media docena de personas descendió del Aviocar para subirse inmediatamente al helicóptero, que les esperaba para volver a despegar hacia Formentera. Otras fuentes aseguran que también intervino en estos vuelos de finalidad estrictamente privada un CN-235 (con capacidad para 48 pasajeros).

Según testigos presenciales, los aviones transportaban a varios grupos de personas, predominantemente parejas, vestidas con ropas civiles de aspecto veraniego. Su presencia llamó la atención del personal de pista, ya que bajaron del avión y subieron al helicóptero sin pasar por la terminal, «como si fuera la parada del autobús», aseguró uno de los testigos. Además, el acceso de civiles a los aparatos militares está muy restringido y es muy infrecuente, según recalcaron.

Según todas las fuentes, se produjeron dos llegadas de estos aviones militares, el sábado en torno al mediodía, y otras dos el domingo, mediada la tarde, lo que obligó al helicóptero, con capacidad para 18 pasajeros, a realizar cuatro vuelos entre el aeropuerto y Formentera.

El lujoso hotel Geko Beach de Migjorn, elegido por los novios para la fiesta, dispone de paredes encaladas a pie de playa, jardines amplios y habitaciones recubiertas de teka indonesia, pero carece de helipuerto. Por ello, el Puma, de 18 metros de envergadura y 271 kilómetros hora de velocidad de crucero, tuvo que aterrizar en los terrenos donde se proyectaba el camping de es Ca Marí, a la vista de numerosos curiosos, que también fueron testigos del desembarco de civiles hacia el restaurante donde se celebró la boda y de cómo embarcaron de nuevo el domingo.

El teniente coronel al mando de la base del SAR en Mallorca, Fernando Delgado, no quiso aclarar ayer si los aparatos de su base intervinieron en este dispositivo. Tampoco respondió a la pregunta de si él mismo acudió al enlace: «No puedo hablar. Los hechos se están investigando».

Las primeras conclusiones de la investigación abierta por el cuartel general del Ejército del Aire admiten que hubo «un uso indebido» del aparato, por lo que se ha abierto un expediente disciplinario a sus responsables, aunque no precisó ni su número ni su rango. Sin embargo, el Ministerio de Defensa desconocía ayer que también hubieran participado aviones en este mismo operativo. El Delegado del Gobierno, Ramon Socías, anunció la apertura de un expediente y ERC ya ha llevado este caso al Congreso.