Todos los trabajadores de la oficina liquidadora de Ibiza se manifestaron ayer por la mañana para exigir al Govern balear que no despida a ninguno de los empleados. Los cerca de veinte trabajadores de la oficina, además de portavoces del sindicato CSIF, se concentraron frente al portal del registro, en la avenida Ignasi Wallis. «¡No al despido! ¡Reubicación!», gritaron hasta que el portavoz de los trabajadores, Antonio Palau, comenzó a leer el manifiesto.

«Con la supresión de la oficina liquidadora de Ibiza se despedirá a diez trabajadores», leyó el portavoz. Éste recordó que la Agencia Tributaria de Balears comunicó su intención de asumir las competencias de la oficina el 18 de octubre «mediante una comunicación verbal». La confirmación por escrito les llegó el 26 de ese mismo mes «tan sólo dos meses escasos antes de que se deban producir los despidos».

«Se creará una nueva oficina cuya previsión es de 15 plazas, de las cuales siete están adjudicadas a personal ya adscrito a la Agencia Tributaria. Y respecto a las ocho restantes, serán cubiertas mediante bolsines que ignoran por completo los méritos de los actuales empleados», detalló el portavoz de los trabajadores, que afirmó que de esta manera se «desaprovecha un capital humano de enorme valía, compuesto de empleados competentes con experiencia de hasta 30 años, y con un continuo reciclaje y formación dentro de su área». Palau, que exigió que se escuche a los trabajadores de la oficina, calificó el traspaso de competencias a la Agencia Tributaria de «precipitada y unilateral».

«El que lleva menos tiempo aquí, hace ya cinco años que trabaja en la oficina», detalló Ignasi Landaburu, encargado del registro mercantil, que señaló que en las últimas semanas se ha estado «intentando ver si hay alguna manera de adscribir a estos trabajadores, ya que deben hacer lo mismo que se ha hecho hasta ahora». Landaburu considera que, por este motivo, «lo más lógico es que cojan a estas personas, algunas tienen 30 años de experiencia». El encargado del registro y el portavoz de los trabajadores explicaron ayer tras la concentración que la única respuesta que han obtenido es que se crearán bolsines extraordinarios. «Pero han convocado únicamente a trabajadores del Govern», lamentó Landaburu, que insistió en que el hecho de que la Agencia Tributaria de Balears asuma las competencias de la oficina liquidadora significará que se «reduzcan los servicios en la isla de Ibiza».