Los alumnos del curso de jardinería ecológica de la escuela taller Es Romaní, de Sant Josep, han reiniciado esta semana las prácticas del curso con las primeras tareas de plantación que se llevan a cabo en el nuevo vivero municipal, ubicado en un solar contiguo al cementerio del pueblo de sa Talaia.

El Ayuntamiento ha creado este vivero en un terreno de unos 2.000 metros cuadrados que ha sido cercado con una valla metálica y en cuyo interior se han instalado un invernadero de 80 metros cuadrados y un umbráculo de 360, donde se producirán las diferentes variedades de jardinería, plantadas tanto de esqueje como de semilla.

En el exterior de los dos dos nuevos recintos queda terreno libre en el que se trasplantarán provisionalmente las plantas arbóreas, una vez que se saquen del invernadero. A la entrada del solar se ha creado un jardín de cactus.

El taller de jardinería ecológica se inició en octubre de 2008 y tiene prevista una duración de dos años. Su objetivo es formar a un grupo de alumnos (actualmente diez), capacitándoles para gestionar profesionalmente un jardín. Se pretende que el vivero, al mismo tiempo que sirve para realizar prácticas didácticas, tenga capacidad para proporcionar plantas para los jardines públicos del municipio de Sant Josep.

El vivero es un proyecto totalmente municipal y se financia con recursos del Ayuntamiento, aunque el curso de jardinería se lleva a cabo bajo la financiación del Consistorio, el Servei d´Ocupació de les Illes Balears (SOIB) y el Fondo Social Europeo.

Antes de las vacaciones de verano los alumnos del taller de jardinería llevaron a cabo los trabajos de montaje del invernadero y el semillero, así como un almacén de herramientas, consistente en una caseta metálica. Ahora, una vez reiniciado el curso, empiezan a plantar las primeras semillas. Concretamente, se inician las actividades propias de jardinería, que se desarrollan especialmente en otoño e invierno.

La directora de la escuela taller, Beatriz Torreblanca, explica que para elegir las plantas que se producirán en este invernadero se han tenido en cuenta una serie de condicionantes. Deben ser plantas autóctonas, que tengan unas ciertas propiedades ornamentales y que se hayan sembrado con técnicas ecológicas. Enumeró entre otras la lavanda, el romero, la genista, diferentes tipos de cactus, aloes, pitas, palmeras y pinos.

Formación teórica

Pero los alumnos de este taller no se limitan a realizar clases prácticas, sino que también reciben formación teórica en un aula situada en el edificio del Juzgado de Paz. Beatriz Torreblanca señaló que ahora, mientras las temperaturas son todavía tan altas, buena parte del tiempo se dedica a clases teóricas, aunque en el conjunto del curso hay más tiempo para prácticas que para clases teóricas.

El actual equipo municipal de gobierno de Sant Josep, que ha diseñado el proyecto, considera que con el tiempo el vivero le va a resultar rentable, puesto que evitará tener que comprar las variedades de jardinería destinadas a los jardines públicos, cuyo espacio no deja de ampliarse.