Como todos los iniciados tienen también argot propio. Si no es por el sindicato USO nos quedamos sin enterarnos de que en la jerga de los políticos de Baleares ´nivel 33´ significa que pagamos de por vida 16.300 euros anuales a todo el que fue alto cargo dos años en la Administración autonómica. Se llama ´complemento de alto cargo´ y se lo tenían muy callado mientras discuten sobre el sexo de los ángeles en el Parlament. Es el único tema en que están de acuerdo todos los partidos: compadecerse de sí mismos por lo mucho y bien que lo hacen y beneficiarse del dinero del contribuyente autoadjudicándose de por vida compensaciones a sus desvelos. Del mismo contribuyente al que exigen dar el do de pecho y aguantar recortes de su nómina, aumento de horas trabajadas sin pagar, del IRPF, del IVA... para que ellos se puedan permitir raptos de dignidad cuando les hablan de recortar regalías que les diferencian de los ciudadanos de a pie.

No es de recibo que los poderes públicos tomen a diario decisiones que nos empobrecen y olviden lo que todos parecen saber excepto ellos, pero es clamor general: que el dispendio prescindible y ruinoso son ellos.

Rajoy promete eliminar un 30% de concejales. Se queda corto. Sobran más y los más sospechosos de sobrar son los que se creen imprescindibles. Pero mientras al común le recortan de modo automático e inmediato sin preguntarle, podemos dar por seguras las dilaciones que frenarán la medida de mandar políticos inútiles y aprovechados a su casa.

Que las comunidades hayan cerrado dos empresas de las 600 previstas refleja lo tranquilos que se lo toman mientras les paguemos su dignidad a base de vacaciones y pagas extra evaporadas. El PSOE, IU y UPD exigen que el Gobierno se baje el sueldo, lo que estaría muy bien si empezaran por ellos mismos.

Nos dirige gente que se pone su sueldo, provee para su futuro y se exonera de crisis y recortes a nuestra costa. El reparto lo hacen como en tiempos feudales, solo que ya no nos protege el marqués: protegemos al marqués y lo llaman democracia. Su ejemplo de egoísmo e insensibilidad los descalifica de la vocación de servidor público, la única justificación para ocupar cargos políticos. Es un sarcasmo que nuestra representante Pilar Costa aduzca la «dignidad» para no participar en lo que sufren sus representados. Parecen convencidos de representarnos solo para cobrar gastos de representación.

Desde aquí no se les hace la propuesta de que limiten su privilegio legal de otorgarse prebendas, ni se les amenaza con protestas, boicots ni nada por el estilo. Solo se les pide que hagan lo que es correcto como asunto de conciencia. En base a una obligación que debe compartir toda la gente con razón y buena voluntad: una obligación para con la dignidad humana y el bien común. O habrá que volver a hablar de señores y plebeyos.