Las autoridades de la Administración Federal de Aviación civil (FAA en inglés) de Estados Unidos investigan si un niño de siete años dio instrucciones por radio a un piloto durante el despegue de un avión en el aeropuerto John F. Kennedy, de Nueva York (EEUU), el pasado 17 de febrero.

La cadena de televisión Fox, en el área de Boston (Massachusetts, EEUU), obtuvo la grabación de ese momento y la emitió en sus informativos, además de haberla colgado hoy en su página "web".

Tras conocerse el incidente, la FAA indicó a ese medio que ha abierto una investigación al respecto, y que "los empleados involucrados en ello no estaban controlando el tráfico aéreo".

"Ese comportamiento no es aceptable y no demuestra el profesionalismo que la FAA espera de sus trabajadores", agrega el comunicado, que también dio a conocer esa televisión.

En la grabación, se oye la voz de un niño, hijo de un controlador, que realiza varias transmisiones de radio a pilotos desde la torre de control del aeropuerto con mensajes como "JetBlue 171 contacto para despegue" y la voz masculina de un adulto que agrega: "Preparado para despegue Jet Blue 171, buen trabajo".

"Adiós, amigo"

"Esto es lo que pasa, chicos, cuando los niños no van al cole", se oye decir a una voz masculina desde la torre de control que, al parecer, era el controlador que estaba supervisando esa operación, y poco después se vuelve a oír la voz del niño, que dice en español, "adiós, amigo" y que tiene la misma respuesta de un adulto.

Posteriormente, se supo que el mismo controlador dejó unos días después que su hija de ocho años diera también instrucciones a otro piloto que estaba en pista.

El aeropuerto internacional de John F. Kennedy es uno de los de mayor tráfico aéreo del mundo, con miles de aviones que cada día aterrizan y despegan de sus pistas, y a su torre de control, con fuertes medidas de seguridad, se supone que sólo entran los controladores autorizados.

Asimismo, el sindicato de controladores, señaló FOXTV-Boston, emitió un comunicado de condena por el comportamiento de quienes permitieron la situación, y subraya que "no es un indicativo de los altos estándares profesionales que los controladores se exigen a sí mismos". Agregaron que, ello, "afecta a los avances que en todo momento y a diario se buscan para la seguridad en la aviación".