El revuelo provocado por la dimisión de Alfonso Molina consumió la mayor parte de la agenda política de ayer en el Ayuntamiento de Ibiza. El alcalde, Rafa Ruiz, confirmó que para cubrir la vacante que deja Molina «se tirará de lista», refiriéndose a que, en principio, ha de entrar la persona que ocupaba el siguiente puesto en la candidatura, y que no es otro que Francisco Adell, que actualmente es delegado en Ibiza y Formentera de la Escuela Balear de la Administración Pública (EBAP). Ruiz no quiso detallar si aprovechará para hacer una remodelación de áreas: «Dadme tiempo», rogó a los periodistas que le preguntaron.