Inés Ventos indica que el maestro ´Frígoles´, junto a otras personas, ayuda en este libro a «reivindicar» una manera «de hacer y de vivir». También de la mano de Toni Marí descubre un inmenso «vocabulario particular con muchas variantes, fruto de una rica tradición oral llena de dichos y refranes». La autora deseaba así «dar voz a unos objetos únicos, piezas de uso cotidiano marcadas por la necesidad diaria de los habitantes de la isla. Mediante estos objetos descubrimos un lugar, una naturaleza, una gente y sus costumbres», indica.