El Consell de Formentera ha adjudicado a la empresa Posidonia Sub un contrato que contempla el balizamiento de todas las playas de Formentera, señalando una zona de baño de 200 metros en la que no pueden entrar embarcaciones. También se asigna toda una serie de canales de entrada y salida para que las pequeñas embarcaciones y auxiliares puedan acceder al litoral.

Aunque la contrata prevé que todo el balizamiento de playas esté montado entre el 1 de mayo y el 15 de octubre, la conselleria de Medio Ambiente del Consell de Formentera reconoce que se ha producido «un retraso».

El motivo hay que buscarlo en las divergencias surgidas con la Cofradía de Pescadores, que ponía pegas al excesivo balizamiento en aguas en las que todavía pescan, por lo que la presencia de las líneas de boyas podía representar un perjuicio para su actividad.

El área de Medio Ambiente admite que se había producido «alguna demora en el montaje, aunque a día de hoy está cubierto más del 80% de la instalación». Una de las razones aducidas es que «hay dos puntos (la ampliación en Cala Saona desde la playa hacia Punta Rasa y al norte hacia sa Punta de es Caló d'en Trui, y la zona de es Pujols), donde el montaje se llevará a cabo en el mes de junio».

Esta decisión es fruto del consenso con la Cofradía de Pescadores de Formentera «para hacer compatibles sus prácticas pesqueras durante la temporada media, cuando todavía no hay demasiadas embarcaciones, garantizando así la seguridad de los bañistas».

El montaje

Mientras, el montaje de las líneas de boyas (que marcan la zona de seguridad de los bañistas, en la que no pueden entrar embarcaciones ni artefactos flotantes) ya está tendido en toda la zona del Parque Natural: Cavall d'en Borràs, ses Illetes, es Trucadors, bahía de s'Alga en s'Espalmador, Llevant, hasta casi sa Roqueta, y una buena parte de Migjorn.

En esta zona queda pendiente balizar un nuevo tramo de la playa de es Valencians. En Cala Saona, Illa des Pouet, zona des Pas des Trucadors, playa de Llevant y playa des Pujols hay un canal de entrada, y en las playas de Migjorn y s'Alga (en s'Espalmador) hay dos accesos.

La contrata ha sido adjudicada a la citada empresa por 34.500 euros anuales (sin impuestos), cuando el precio de salida era de 44.100 euros, es decir, que Posidonia Sub ha aplicado una rebaja del 21% sobre la oferta inicial.

La contrata tiene una vigencia de dos años, prorrogables otros dos, e incluye el montaje y desmontaje de todos los elementos necesarios con anclajes ecológicos y siempre sobre fondos de arena.