La puesta en marcha del servicio de asesoramiento y vigilancia al fondeo de embarcaciones para evitar que tiren el ancla sobre las praderas de posidonia de Ibiza y Formentera ha comenzado con mal pie y de forma improvisada.

La empresa adjudicataria del contrato, Solrac Plus Inversiones y Servicios SL, que ganó el concurso por 176.968 euros, debía haber empezado a trabajar con seis embarcaciones y sus respectivos patrones el pasado domingo, pero no lo hizo hasta ayer por la tarde y sólo con dos embarcaciones.

Incluso ayer por la mañana varias tripulaciones de barcos que querían fondear sin dañar la posidonia utilizaron el canal 68 para solicitar la presencia de los vigilantes, pero nadie contestó al no estar operativo.

Mientras, dos de estas lanchas neumáticas han permanecido fondeadas en s'Estany des Peix, al parecer amarradas a una boya con muerto (una pieza de hormigón), práctica que está prohibida.

El caso es que, según el pliego de condiciones que rige el concurso, deberían haber empezado a trabajar las seis embarcaciones distribuidas por zonas: una en ses Salines de Ibiza; dos en la zona de Cavall d'en Borràs y ses Illetes, donde mayor presencia se registra de barcos de recreo;una entre Cala Saona y el puerto de la Savina; otra en la zona de Llevant y la última en es Carnatge y es Caló de Sant Agustí.

El Govern balear ha triplicado la presencia de embarcaciones con esta nueva contrata respecto a las dos lanchas que operaban el pasado año y también ha ampliado la zona de vigilancia. Pero el servicio ha comenzado tarde.

Según ha podido saber este periódico de fuentes cercanas al servicio, ayer cuatro patrones de los siete que la empresa adjudicataria debe contratar, estaban recibiendo una charla informativa por parte de una técnica de la conselleria sobre cómo debían realizar el servicio.

Incluso la consellera de Medio Ambiente de Formentera, Daisee Aguilera, estaba descontenta con la forma en la que han comenzado a trabajar: «Desde el Consell estamos preocupados porque nos consta que ha habido navegantes pidiendo la asistencia al fondeo y no se les ha dado y así se lo hemos trasmitido al Govern balear», aseguró en la mañana de ayer.

Casualmente, por la tarde esas dos lanchas comenzaban a trabajar especialmente en la zona de ses Illetes.

Las lanchas tipo neumáticas cuentan con todos los equipos necesarios de comunicaciones y un motor de 50 caballos de potencia. Cada una de ellas dispone de un patrón que es el encargado de avisar a los capitanes de los barcos si están bien o mal fondeados. Además, atienden las demandas de asistencia a través del canal 68, tal y como aparece en las lanchas que llevan el escudo del Govern.