Familias en bicicletas y visitantes solitarios disfrutan, en el final de la temporada turística, del auténtico paraíso del que hace gala Formentera en sus campañas de promoción turística y que para muchos solo se encuentra a principio y final del verano. Las buenas condiciones meteorológicas han permitido que la temporada se prolongue hasta el final de este mes y que los caminos y lugares más frecuentados en los meses de verano, como la playa de ses Illetes, sean ahora un auténtico lujo al alcance de los privilegiados que han podido coger sus vacaciones en esta época del año. La tranquilidad tan anhelada en verano inunda ahora todo el territorio insular, que tanto los residentes como los últimos turistas exprimen hasta el último minuto del día.