Una placa, una fotografía de recuerdo de sus compañeros obreros de la parroquia y un fuerte aplauso fue ayer el homenaje de la parroquia de Sant Rafel a José Ramon Serra, Pep Pilot, obrero mayor y concejal de Sant Antoni desde 1991 a 2011, que falleció a los 70 años el pasado mes de julio. Sus familiares no pudieron reprimir las lágrimas y tampoco algunos de sus compañeros de filas en el PP de Sant Antoni, como Lidia Prats, muy afectada por su pérdida. Una de sus hijas, Sara Ramon, agradecía el gesto: «Es un detalle muy bonito, estamos emocionados. Ver que la gente le quería tanto... Siempre estaba colaborando en la parroquia, desde su infancia, cuando fue monaguillo, y sobre todo desde que dejó la política cuando se involucró todavía más con los vecinos. Tenía vocación de servicio público de forma exagerada, era su motor», comentaba su hija casi sin poder contener la emoción.

El alcalde de Sant Antoni, Pep Tur, Cires, también tuvo palabras de recuerdo para Pep Pilot en el día grande del pueblo: «ha recibido un homenaje muy merecido». Cires avanzó además que ya está muy próxima una inversión importante para Sant Rafel «para solucionar el problema de las aguas pluviales en la carretera», además de dos avances en la ordenación del núcleo urbano: «hacen falta dos cosas, por una parte el Plan especial de protección de la iglesia de Sant Rafel [que obliga a que todos los proyectos que estén en un arco de 250 metros pasen por la Ciotupha del Consell], así como hacer un plan para el núcleo urbano de Sant Rafel que debido a las autopistas y demás ha quedado muy mejorable. Queremos hacer un estudio para incluir las posibles mejoras en el Plan de Ordenación de Sant Antoni», remarcó el alcalde.

35 años de sacerdocio

El obispo de Ibiza, Vicente Juan Segura, recordó ayer durante la homilía que se cumplen exactamente 35 años de su ordenación como sacerdote en 1988, una efeméride que celebró con prácticamente todos los sacerdotes de la Diócesis presentes en la eucaristía. El obispo copresidió la misa con el sacerdote de la parroquia Francey Gómez, que recordó que se aproximan las celebraciones de Todos los Santos y Difuntos, y pidió la contribución de los feligreses para la renovación de la iglesia, que se va a pintar por completo a partir del 7 de noviembre.

El templo se llenó pero no tanto como en otras ocasiones porque el festivo de la parroquia cayó en día laborable, lo que impidió que muchos vecinos asistieran a la cita, que terminó con una demostración de baile de la Colla de Sant Rafel, tras la procesión en la que varios miembros portaron la imagen de Sant Rafel, engalanada con girasoles y uvas.

Pero de lo que se hablaba ayer en los corrillos entre bunyol y bunyol no era otra cosa que de la falda de la vicepresidenta segunda del Consell, Marta Díaz, un diseño de Tony Bonet estampado con llamativas calaveras de gran tamaño. El atuendo, a pocos días de Halloween y la fiesta de Difuntos, dio para muchos comentarios.

Acudieron entre otras autoridades el presidente del Consell, Vicent Torres, el senador Santi Marí, el diputado Vicente Marí Bosó, los exalcaldes de Sant Antoni Pepita Gutiérrez y José Sala y buena parte del equipo de gobierno y la oposición del municipio, entre ellos el concejal de Cultura de Sant Antoni, Fran Tienda, que repartió bunyols como un vecino más.