La UCI es el Servicio en el cual se concentra el equipo material y humano necesario para el cuidado de los pacientes críticos. Esta unidad de la Policlínica cuenta con personal altamente cualificado y especializado en Medicina Intensiva, y atiende a unos 300 pacientes por año.
En verano predominan los politraumatismos y otros problemas derivados del turismo, mientras que en invierno, son más frecuentes las infecciones respiratorias y las complicaciones de enfermedades crónicas. La severidad de las patologías que se tratan en UCI requiere que sus trabajadores (seis intensivistas, enfermería y auxiliares) estén entrenados y en formación constante. Es fundamental la capacidad de toma rápida de decisiones y de trabajo en equipo, siendo decisiva la coordinación de tareas.
El servicio de formación continua de Policlínica ofrece programas de actualización en respuesta a las necesidades de su personal sanitario (por ejemplo, Curso de Ecografía de Urgencias, Reanimación Cardiopulmonar).
Equipamiento de primera línea
La UCI dispone de un equipamiento de primera línea: las nueve camas de cuidados intensivos disponen de un respirador mecánico de última generación y de un monitor de cabecera preparado para neuromonitorización invasiva y hemodinámica continua conectado a una central situada en la estación de enfermería, donde los profesionales pueden controlar la evolución minuto a minuto.
En las cuatro habitaciones del sector de cuidados intermedios se ha buscado sumar los beneficios del monitoreo permanente y los de la presencia familiar. Esto resulta altamente positivo para los pacientes que están superando la etapa aguda de su enfermedad, y han iniciado el camino de la recuperación.
La renovación y mejora en equipamiento es considerada una prioridad: en los últimos meses se ha incorporado un ecógrafo para diagnóstico inmediato de ciertas patologías a pie de cama del paciente, así como también la compra de un respirador mecánico dotado con la tecnología más avanzada.
La UCI no es un servicio independiente dentro de la Clínica, sino que debe trabajar muy estrechamente con otras unidades, como por ejemplo, urgencias, medicina interna, especialidades quirúrgicas, fisioterapia, cardiología y hemodinámica cardiaca.
La atención integral del paciente tanto durante su estancia en UCI como luego del alta de la misma, requiere una coordinación perfecta entre los equipos humanos del hospital.
Evitar traslados a Palma
La complejidad creciente de esta Unidad de Cuidados Intensivos de Policlínica Nuestra Señora del Rosario, así como los conciertos de Neurocirugía urgente y Hemodinámica Cardiaca con el Ib-Salut han sido los factores que han incrementado el número de enfermos en estado grave que pueden recibir atención de calidad en Eivissa. Esto evita el traslado a Palma de Mallorca de pacientes inestables, con las demoras en el tratamiento que esto implica y los riesgos inherentes al transporte aéreo en estas circunstancias.
