—¿En qué momento pensó que el pop podía triunfar en una discoteca?

—´Pop Star´, en realidad, no es una fiesta pop. Es música electrónica, pero en lugar de cantantes o vocalistas de house intenté convencer a grandes estrellas del pop para que cantaran temas house. No son versiones. Lo que he hecho ha sido producirles temas nuevos o remezclar con la electrónica éxitos antiguos.

—¿Qué diferencia hay entre esto y lo que hacía antes?

—Como dj es lo mismo, pero el show se enriquece mucho pudiendo traer celebrities consolidadas internacionalmente en la música. Lo que me interesaba era dar un enfoque diferente a la fiesta. Estaba cansado de pinchar, era siempre lo mismo. Incorporando artistas como Marta Sánchez, Mónica Naranjo o Sophie Ellis Bextor lo que se conseguía era dar toque más glamuroso a la fiesta, más alcance, no solo para el purista de la música electrónica.

—¿Las discotecas se están convirtiendo en las nuevas salas de conciertos?

—Hace dos años, cuando empecé con ´Pop Star´, la gente dijo que estaba loco, que no iba a funcionar. Yo sabía que sí porque había un público que demandaba una electrónica un poco más comercial, no tan underground. Ahora veo que los que me llamaban loco están haciendo lo mismo que yo, contratar artistas pop para que actúen en las discotecas. Puedo decir que he sido pionero en esto y para mí es un orgullo. Es un orgullo ver que los que te tildaban de loco chaquetero se han tenido que comer sus palabras y ponerse la misma chaqueta.

—¿Se puede disfrutar la noche trabajando en ella?

—Sí, se puede disfrutar, el problema, en mi caso, es que ya no soy un dj al uso, ya no estoy toda la sesión pinchando y yendo a lo mío, y tengo que prestar atención a la escaleta, a las actuaciones de los cantantes, al pianista, el guitarrista… Se disfruta, pero también hay mucha tensión. No es como antes que estaba cinco horas pinchando en mi mundo y ya está. ¿Sabes qué es lo más difícil de esto? Los egos.

—¿Hay mucho ego en la noche?

—Hay mucho ego.

—¿Echa de menos pinchar cinco horas y no pensar nada?

—Ahora sí. Cuando lo tenía, no lo quería, pero ahora lo echo de menos. Pero subirme al escenario con gente como Marta Sánchez o Mónica Naranjo es un placer. Ellas dos son las que menos problemas dan. Las mayores divas, muchas veces, son con las que mejor se puede trabajar. En el caso de Marta Sánchez es supersencillo. Se sube al escenario, lo rompe y luego se va a su privado a tomar unas copas con los amigos hasta que vuelve a salir. Mónica es la diva de las divas. No hay mayor diva que ella en España, pero dentro de ese divismo hay una persona supersencilla. Con Mónica crees que será muy difícil por todo ese aura que la rodea. Las dos son muy exigentes, pero Marta vive en Madrid, Mónica en Barcelona y con ella tengo una relación muy fuerte.

—La última vez que ha salido de fiesta…

—¡Uf! Tengo que pensarlo. Hace mucho. Probablemente, en enero, en mis vacaciones en Asia. Ya no piso discotecas si no es para trabajar. El poquito tiempo que me queda lo paso con mi mujer y mi perro.

—¿Se mitifica el mundo de la noche?

—No, creo que no, es lo que es . El negocio nocturno está para que la gente se lo pase lo mejor que pueda. Los que trabajamos en la noche somos los que la hemos desmitificado hace tiempo.

—Hace poco ha intentado enseñar a Samanta Villar a pinchar. ¿Se puede enseñar a alguien en diez días?

—Sí, claro. Se puede enseñar a alguien a mezclar un par de discos. Para hacer una sesión completa se necesitan muchos años. A nivel técnico cualquiera puede pinchar, hasta el más tonto, sobre todo hoy en día, con programas como Traktor que te lo hacen todo. De hecho, creo que es muy feo que muchos de los djs que cobran millonadas se limiten a pinchar con el ordenador. Un buen dj tiene que ser un psicólogo de la noche. Cuando empiezas tu sesión tienes que llevar a la gente a tu terreno y mantenerla arriba lo máximo que puedas. Pero no puedes estar poniendo los mejores temas unos tras otros porque en media hora estarán cansados. Tienes que hacer que tu sesión sea una conducción de un punto al otro. Y tienes que llegar al final con la misma gente en la pista de baile. O más.

—Visita más de 50 países al año. Si le vendamos los ojos y le plantamos en una discoteca en cualquier lugar del planeta, ¿sabría dónde está?

—Si me desvendas los ojos en la discoteca sí.

—Viniendo de una familia de artistas ¿fue traumático decir en casa que quería ser dj?

—Fue muy traumático. Mi padre era empresario de la noche y un locutor de radio muy famoso. Su círculo de amigos eran Los Pecos, Miguel Bosé, Alaska, Julio Iglesias… Cuando dije que quería ser dj mi padre se tiró de los pelos. En aquella época, yo tenía 14 años, el dj pinchaba de cara a la pared, dentro de una barra y era el que menos cobraba de la discoteca. Pero siempre que veía al dj que era el que manejaba a la gente como él quería yo quería hacer lo mismo. Mi padre no me ayudó para nada, todo lo contrario, estuvo poniéndome palos en las ruedas constantemente a ver si conseguía cambiarme. Su obsesión era que fuera notario, como todos los padres. Pero al final no le quedó más que claudicar y ahora está más que orgulloso.

—¿Y su madre?

—Mi madre siempre me apoyó, desde el primer día. A los 14 años me preguntó qué quería para mi cumpleaños. Todos pedían la Vespino y yo le pedí una mesa de mezclas. Y me la compró.

En breve

La canción que más ha pinchado: ´Out of the blue´, de Ferry Corsten.

El último disco que ha comprado: Es que compro a tacadas, pero uno de los últimos ha sido el disco póstumo de Michael Jackson. Era único e inigualable. No veas cómo lloré cuando murió. Crecí con él, para mí era lo más.

Escoja un tema de…

…Marta Sánchez: ´Soy yo´.

…Mónica Naranjo: ´Crying for heaven´, que no lo conocéis porque es el que estoy haciendo con ella. Lo presentamos el 14 de agosto.

…Sophie Ellis Bextor: ´Murder on the dance floor´ y ´Save myself´, que hemos grabado.

…Soraya: ´Live your dreams´.

Un tema con el que no pueda: ¿Que odie con todas mis fuerzas? Es que hay que ir con cuidado, pero no soporto a Melendi, así que cualquier tema de Melendi.

Una fiesta de Ibiza que no sea la suya: ´I want my MTV Ibiza´.