Sergio Alcover desayuna más bien poco: unas lonchas de pavo, un poco de pan y un café. A su alrededor los técnicos transportan cables de un lado para otro. El bailarín está tranquilo pese a que el ambiente invita al estrés.

¿Qué perfil de bailarín buscan?

—Buscamos personalidad más que técnica. La técnica es importante pero no nos interesa los que solo repiten lo que ven.

—Fuera hay personas que ya se han presentado a castings de otras ciudades…

—¿Ah sí?, me parece estupendo. Yo también lo haría. La perseverancia es un valor y un casting es una entrevista de trabajo. Solo estrellas como Russell Crowe no necesitan estas pruebas para trabajar.

—¿Conoce algún bailarín ibicenco?

—Lo cierto es que no conozco bailarines de ningún lado. Vivo siempre en mi cueva pero me acuerdo que en el casting que se organizó el año pasado en Ibiza había un nivel bastante alto.

—De hecho, el ganador surgió de las pruebas de Ibiza…

—Sí, Jonathan Anzalone, de Los Angeles, pero estaba aquí de vacaciones. Se presentó con todo el morro porque no tenía citación y al final ganó el concurso. Si no eres un echado ´pa lante´ dedícate a otra cosa.

—¿Tiene previsto venir a Ibiza más adelante?

—Sí, tengo pensado venir tres días en agosto con unos amigos. El 10, el 11 y el 12, concretamente. Suelo venir bastante. Trabajé en la fiesta Manumission hace unos años cuando estaba en su apogeo. Ahora las cosas han cambiado.