Duro varapalo el que encajó anoche en casa el Puchi ante las cámaras de Teledeporte en un partido crucial para sus aspiraciones de permanencia y en el que fue claramente superado por uno de sus más directos rivales en la clasificación, un Canyamelar Valencia que acabó imponiéndose al final por un trabajado tanteo de 22-25.

Con este resultado adverso el conjunto ibicenco se queda en la undécima posición con tan sólo un punto de diferencia por encima del Canyamelar y se complica la existencia de cara a las últimas cinco jornadas, en las que tendrá que jugarse la salvación sin margen para nuevos tropiezos frente al Elche, el Zuazo, el Castellón (en el que será un partido clave y decisivo), Rocasa Gran Canaria y Rincón Fertilidad de Málaga.

En lo que respecta al choque de anoche, cabe destacar que en el arranque del mismo las santaeulalienses empezaron mandando en el marcador y situándose con un 2-0 de ventaja que parecía encarrilar el desarrollo del partido a su favor.

Sin embargo, después de los primeros cinco minutos, las de Noel Cardona comenzaron a mostrarse algo nerviosas e imprecisas a la hora de trenzar su juego y sin la efectividad necesaria en muchos de los lanzamientos que realizaron en los ataques estáticos.

Esa falta de tensión fue detectada y perfectamente aprovechada por un Canyamelar que fue remontando y dominando en el marcador hasta situarse con una cómoda renta de 5-9 a falta de diez minutos para el descanso. Tan sólo Carmen Campos, que a la postre se erigió como la máxima goleadora del encuentro con 13 tantos, fue capaz de sostener a sus compañeras dentro del partido, permitiendo al Puchi llegar al intermedio con un tanteo en contra de 9-13.

Una reacción breve y a impulsos

Una reacción breve y a impulsos

Tras el descanso, salió el equipo local con ganas de plantar cara a sus crecidas rivales y protagonizaron a golpe de coraje y pundonor una destacada reacción en los primeros compases que les permitió recortar diferencias para colocarse con un marcador de12-15, a los diez minutos de la segunda mitad. No obstante, las jugadoras valencianas no cedieron terreno y supieron frenar el empuje de las ibicencas ampliando de nuevo su ventaja hasta un16-20, antes de acometer la recta final del duelo.

Las pupilas de Noel Cardona no se dieron por vencidas y apuraron sus opciones apretando en defensa y mostrándose más precisas en las tareas ofensivas. Ese arreón de inconformismo les permitió ponerse con un apretado tanteo de 19-21 y encarar los últimos cinco minutos con algunas posibilidades de vencer, aunque el anhelado milagro de la remontada, finalmente, para desolación de la hinchada del Puchi, no se produjo.