La Peña Deportiva sufrió ayer un duro correctivo en el campo del Badalona, que endosó un contundente 4-1 al conjunto ibicenco, que llegaba a este encuentro tras haber sumado dos empates consecutivos. La expulsión de Selfa en el minuto 56 del choque perjudicó mucho al bloque de Santa Eulària, que vio seriamente mermadas sus posibilidades de sacar algo positivo de Cataluña.

La escuadra entrenada por Dani Mori venía en clara progresión (tras las igualadas frente al Olot y el Sabadell, ambas por 1-1), pero le faltaba ratificarla con una victoria que ayer no consiguió.

El Badalona salió fuerte y Kevin, cuando sólo se llevaban tres minutos de juego, dispuso de una buena ocasión para adelantar a los suyos, pero no estuvo acertado cuando lo tuvo todo a favor para marcar. Se lanzó para rematar un centro-chut de un compañero, puso el pie pero el balón salió desviado cuando se cantaba el gol en la grada del Municipal de Badalona.

Poco antes del cuarto de hora, el que tuvo que intervenir fue el guardameta Morales, que envió el balón a córner tras un disparo de Guille, que también dispondría más adelante de un mano a mano en el que no acertó a batir al meta del Badalona.

Los catalanes buscaron con intención la portería visitante y rondaron el gol con las oportunidades de Kilian, Aly y Albarrán, pero la Peña consiguió salir indemne de los primeros 45 minutos, que acabaron con el resultado con el que comenzó el choque.

La segunda parte no pudo comenzar peor para la Peña, que en el minuto 47 encajó el 1-o. Fue Kevin el que esta vez sí consiguió batir a Dennis. Lo hizo con certero remate de cabeza tras aprovechar un envío largo desde el costado derecho del ataque del Badalona.

Todavía se le iban a complicar aún más las cosas a la escuadra ibicenca cuando se quedó con un hombre menos por la expulsión de Selfa en el minuto 56, tras ver la segunda cartulina amarilla.

El técnico peñista intentó encontrar soluciones al desaguisado e introdujo un triple cambio, dando entrada a Rueda, Marcos y Fran Núñez. El preparador asturiano quiso variar el rumbo de su equipo, pero no lo logró.

Con un futbolista menos, los visitantes se vieron obligados a redoblar esfuerzos. Los isleños lo acabaron pagando al encajar tres goles más en apenas cinco minutos. El 2-0 lo marcó Néstor en el 62 tras un disparo desde fuera del área, mientras que el 3-0 lo logró Marcel Serramitja en el 67 tras aprovecharse de una falta de entendimiento entre el portero Dennis y Pau Pomar.

El partido ya no tenía historia y la posible remontada visitante era un empresa prácticamente imposible. Y más cuando Serramitja marcó el cuarto para los catalanes (4-0) y el segundo en su cuenta particular.

De poco sirvió el tanto de Rueda en el descuento (4-1) al transformar un penalti que cometió Abraham al tocar el balón con la mano dentro del área.

Fue el tanto del honor de los peñistas, que ya tienen que pensar en el siguiente compromiso liguero, el próximo fin de semana en casa frente al Deportivo Aragón, rival que visitará Santa Eulària.