La Peña Deportiva ha tenido que esperar a la tercera jornada, pero Erik Polanco rompió la mala racha ante el Valencia-Mestalla. El jugador vasco de los peñistas sacó petróleo de la única ocasión que tuvo su equipo a lo largo del partido para anotar en el minuto 58 el primer gol esta temporada del conjunto ibicenco, un tanto que le permite además estrenar su casillero de victorias y salir de los puestos de descenso.

El partido estaba lleno de urgencias para la Peña, que estaba obligada a ganar para no quedarse descolgada a las primeras de cambio. En los dos partidos anteriores, pese a perder ante el Formentera y el Mallorca, la sensación general era que se había jugado bien, pero que faltaba gol. Ayer volvió a disputar un encuentro muy serio y ordenado aunque, a diferencia de las dos jornadas iniciales, esta vez sí tuvo la fortuna de encontrar la portería contraria, algo que, en una categoría tan dura y disputada como la Segunda División B, donde suele haber pocos goles y ocasiones, vale su peso en oro.

Los primeros minutos, eso sí, fueron de tanteo y con mucho respeto entre ambos conjuntos. Los locales, con las importantes bajas por sanción de Rueda y Pau Pomar, sabían que no podían permitirse un nuevo tropiezo, por lo que no se fiaban en absoluto de un Valencia-Mestalla que tiene tanta juventud como talento. La preocupación era mayor teniendo en cuenta que el rival llegaba al municipal de Santa Eulària como líder con seis puntos y que cuenta entre sus filas con un jugador de la talla de Rafa Mir, que ya ha debutado en Primera y que es pretendido por clubes grandes.

El delantero cumplió con su cometido y, a pesar del marcaje especial de Alberto, fue un auténtico quebradero de cabeza para la defensa ibicenca. También tuvo en sus botas una de las contadas ocasiones claras a lo largo del partido, cuando ya se había superado la media hora de juego. Mir controló dentro del área una buena asistencia de Alberto Gil, pero su disparo se topó con el cuerpo de Dennis Díaz, muy acertado en su salida. Fue un buen susto para la Peña que, en toda la primera mitad, no inquietó lo más mínimo la portería defendida por Cristian.

En la segunda parte no cambió el decorado. Los valencianistas salieron dispuestos a hacerse con la posesión de la pelota y esperar alguna acción individual del espigado Rafa Mir. La Peña pareció recular, aunque sólo estaba esperando su oportunidad, que debía llegar tarde o temprano. La cuestión era aprovecharla.

Polanco resuelve

La ocasión que estaba esperando llegó en el minuto 58, en la mejor acción en ataque de los locales en todo el partido. Jandrín controló en banda izquierda un balón en profundidad de Marc de Val, cedió al lateral Javi Gallardo, quien colgó el esférico al área para que Erik Polanco, uno de los más destacados del partido, chutara con pierna izquierda al fondo de la red. Todavía quedaban muchos minutos por delante, pero la euforia se desató en las gradas.

El Mestalla tenía que ir a por todas, pero ni siquiera entonces el encuentro ganó en emoción. Más que nada porque la defensa de la Peña seguía demostrando mucha solidez y el conjunto ché no era capaz de generar peligro. El único sobresalto fue una acción de ataque en el minuto 68 que Rafa Mir estrelló en el larquero, aunque el colegiado, el catalán Carrero Romera, la anuló por fuera de juego.

Las cosas no cambiaron de ahí al final -sólo se puede destacar el debut del delantero Alberto Gorriz, que saltó al terreno de juego en el minuto 84- y los tres puntos se quedaron en casa. La Peña, aunque en un partido poco brillante, había puesto por fin la primera pica en Segunda B.