La Unión Deportiva Ibiza-Eivissa y el Ciudad de Ibiza irán de la mano en la temporada 2017-18, según ha confirmado esta mañana el presidente Amadeo Salvo. El acuerdo entre los dos equipos de Vila es total y hoy anunciarán los detalles del mismo, que dejará únicamente a una de las dos escuadras compitiendo en Tercera.

Todavía es una incógnita cómo quedará conformada la directiva y con qué nombre competirá la formación, ya que los dos clubes tenían plaza en el grupo balear. El Ibiza-Eivissa logró el el ascenso este año tras tumbar al Santanyí en la última eliminatoria y el club que preside Ángel Nadal logró la permanencia en su primera temporada en la categoría.

Sin embargo, desde la Federació de Futbol de Balears (FFIB) han confirmado esta mañana que en sus oficinas no hay constancia de una fusión y que "es imposible" llevarla a cabo antes del inicio del curso. "Es una cosa que no se hace de hoy para mañana. No es viable que se haga este año", ha asegurado el secretario de la FFIB, Manuel Bosch.

Sin embargo, Bosch si que ha apuntado una posible alternativa, ya que los clubes pueden llegar a un acuerdo de filialidad y, al tener plaza, pueden inscribir o renunciar según lo crean oportuno. "Si no se ha creado el calendario, los equipos no tienen amonestación ni multa [por renunciar o dejar de competir]. Pero el registro sigue siendo competencia del Govern, nosotros tenemos competencias sobre el tema de filialidad. Pero a nosotros no nos ha llegado nada, ni un papel ni una llamada ni nada", ha afirmado el secretario.

Una vacante en Tercera

Este acuerdo entre los dos conjuntos ibicencos dejará vacante una plaza en el grupo balear de Tercera. Después de ser eliminado en el último partido de la fase de ascenso, el Santanyí impugno el resultado al entender que la UD Ibiza-Eivissa no había completado dos ligas completas en Regional (el club entró en el Registre d'Entitats Esportives de Balears cuando ya había comenzado la temporada 2015-16).

Sin embargo, el Comité de Competición dio la razón a la entidad de Amadeo Salvo y rechazó el recurso de los mallorquines, que anunciaron que irían "a por todas" y hasta el final en busca de defender sus derechos.

Pero este escenario abre un nuevo panorama para el Santanyí, que podría lograr su objetivo sin tener que seguir peleando en los despachos.