Hace años que las máximas categorías del voleibol español perdieron el brillo de otras épocas, en las que el nivel y los salarios de la Superliga eran muy superiores. Sin embargo, la fuga de los patrocinadores y la incapacidad de reclutar a nuevos mecenas está poniendo en jaque a los equipos de la mejor Liga del país. Can Ventura Palma, Unicaja Almería, CAI Teruel y Ushuaïa Ibiza, los cuatro primeros clasificados de la temporada 2016-17, han renunciado a disputar competición europea la próxima temporada.
El caso más dramático lo está viviendo, precisamente, el Club Voleibol Eivissa. La entidad está inmersa en un proceso de renovación tras la renuncia del presidente Javi Escandell el pasado mes de mayo. El que fuera el máximo responsable de la entidad los últimos 12 años dejó el cargo por el desgaste de lidiar con la burocracia y las instituciones, que han sido incapaces de encontrar una solución y que los equipos cobren las subvenciones antes de finalizar la temporada.
Un escenario en el que los ibicencos deberán formar una nueva directiva a toda prisa. En caso de renunciar a la máxima competición, el nuevo presidente debería comunicarlo a la Real Federación Española de Voleibol (Rfevb) antes del próximo 12 de junio, según la normativa que ha publicado el organismo esta semana en su página web. Asimismo, la fecha tope para realizar la inscripción es el 15 de junio.
Fuentes de la directiva del Eivissa han asegurado a este diario que el nuevo equipo directivo debería decidirse antes de acabar la próxima semana, aunque podría anunciarse antes de este mismo domingo. Un tiempo precioso para el conjunto amarillo, que podría encontrarse con muchos problemas para formar una plantilla competitiva.
El CAI Teruel, semifinalista el último curso, fue el primero en renunciar a la competición europea. Los turolenses publicaron el comunicado el pasado 24 de mayo.
Un bicampeón sin premio
Un bicampeón sin premio
«Por segundo año consecutivo, la falta de patrocinios ha hecho que el club naranja haya apostado por la mesura y la contención en el gasto y haya preferido renunciar», informó el vigente campeón de la Supercopa de España y finalista de la Copa del Rey en un comunicado, en el que aseguró que su intención sigue siendo volver a Europa .
Un día más tarde fue el campeón de Liga y Copa, el Can Ventura Palma, quien siguió el mismo camino: «No disponemos de ayudas suficientes y competir en Europa con dignidad. Esto nos obliga a disponer de un presupuesto mucho mayor al que podemos contar con la aportación principal de Damià Seguí [presidente del club]», declaró el mánager y entrenador del primer equipo, Marcos Dreyer.
Además, el Unicaja Almería, una de las dos grandes potencias del voleibol español la última década, cerró el círculo al comunicar a los aficionados la misma decisión este mismo lunes, cuando se cumplió un lustro de la primera renuncia del equipo, que debía disputar la Copa Confederación Española de Voleibol como subcampeón de la Superliga.
El conjunto ahorrador tampoco ha sido capaz de conseguir la aportación privada necesaria para acometer una competición en la que llegó a disputar la Final a Cuatro del año 2009, cuando cayó en semifinales ante el Belogorie Belgorod ruso.
El presidente del Unicaja Almería, Ramón Sedeño, apuntó que la situación del voleibol español merece «una reflexión profunda».
