Formentera y Poblense ofrecieron ayer un excelente espectáculo futbolístico en el encuentro que jugaron en el municipal de Sant Francesc, en el que se impuso el equipo formenterés por 2-1, pero pudo acabar con victoria de los mallorquines y un empate no hubiera desagradado a nadie.
¡Vaya partidazo! Sin duda, estos dos conjuntos estarán en la lucha por el título de Liga y por el ascenso de categoría. Es lo que merecerán si siguen jugando al fútbol tan bien como ayer, que hicieron las delicias de los espectadores. «Es de los mejorcito que hemos visto», comentaron algunos aficionados a la finalización de un choque que tuvo de todo, como tiene que ser: fútbol, goles, emoción, polémica, errores y, para redondear, el regreso de Alberto Gorriz al Formentera.
El Poblense tuvo un viaje «movidito» por culpa del temporal que había en el trayecto a la pitiusa menor, pero sus futbolistas estaban bien frescos a la hora de empezar el partido y a los diez minutos ya pudieron adelantarse en el marcador con un disparo a bocajarro de Sergi Rojals que detuvo con acierto Marcos Contreras. Primera aviso. Primer toque de atención.
El segundo fue siete minutos después con un tanto anulado a los visitantes por un discutible fuera de juego. El Formentera no se puso nervioso, pero entendió rápidamente que el partido sería complicado y que habría que poner todos los sentidos.
La zona ancha se estrechó con la presencia de muchos futbolistas. Era obligatorio entrar por las bandas y el Poblense las aprovechó mejor, pero no completó las internadas. El Formentera también lo intentó con las llegadas de Manu y especialmente de Agus Ojeda, aunque nunca llegó a buen puerto.
El que sí acertó fue Willy, que a la media hora de juego adelantó a su equipo con el lanzamiento de una magistral falta que ejecutó desde fuera del área. Willy, un experto en estos tiros, coló el esférico por la escuadra. Era el 1-0.
Los últimos 15 minutos de la primera parte fueron un toma y daca de los dos conjuntos, aunque los de sa Pobla no encontraron el camino del empate.
En la reanudación, a los formenterenses les faltó tensión y el Poblense lo aprovechó en el minuto 49 para lograr un empate que hacía justicia a su ambición y su juego combinativo.
Los siguientes diez minutos fueron de máxima exigencia y aquí volvió a aparecer el Formentera seguro, tranquilo y valiente y al llegar a la hora de juego Gabriel Gómez metió el 2-1.
Los locales pudieron replegar filas, pero no lo hicieron y aprovecharon un momento de debilidad y desconcierto de los poblers para intentar ampliar el marcador y casi lo consiguen porque Lolo tuvo dos clarísimas ocasiones, pero el joven meta Santi evitó los goles con sendos paradones en el área pequeña.
El Poblense nunca se rindió y, tras unos instantes de flaqueza, volvió a la carga en busca de la igualada. Lo intentó de todas las maneras posibles, pero no lo consiguió porque a veces se precipitó y en otras ocasiones Marcos Contreras volvió a demostrar lo buen portero que es.
Así, entre cansancio, cambios, protestas y nervios transcurrieron los últimos instantes de un encuentro que finalizó con triunfo del equipo local, que acabó desfondado.
El Formentera se quedó con los tres puntos, pero el Poblense puede presumir de no rendirse nunca y de vender cara su derrota.
