Maravilloso. Increíble. Mágico. Se agotan los epítetos al ver al Formentera de Tito García Sanjuán en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. De nuevo 120 minutos, de nuevo una tanda de penaltis (como ante el Saguntino y el Lorca), de nuevo la agonía, jugando con diez desde el arranque de la prórroga por una injusta expulsión, de nuevo Marcos Contreras heroico bajo palos, parando dos penaltis. Y de nuevo la euforia final de un maravilloso bloque de jugadores y cuerpo técnico que ya sueñan con el taquillazo ante un grande. Hay un 33 por ciento de posibilidades de que el Barcelona o el Real Madrid visiten Formentera. El equipo ha cumplido, ahora falta que el sorteo redondee la sonrisa.
El encuentro fue tremendo. Con más dominio del Tudelano, con más ocasiones locales, pero con un Marcos maravilloso salvándolo todo. Agonía cuando, ya en el minuto 45 de la primera parte, Javi Rosa mandaba un balón al palo, enfado cuando en el segundo acto el árbitro se comía un más que posible penalti sobre Juanan y después se inventaba una expulsión a Piña ya en la prórroga por un forcejeo donde vio pisotón sin balón.
El Tudelano comenzó fuerte, pero en el minuto tres el Formentera estuvo a punto de adelantarse cuando, en un saque de córner, el remate de Kiko en el segundo palo lo sacaba Delgado bajo palos. Se pidió gol, pero Baiges Dones optó por el ´sigan, sigan´.
Estuvo bien plantado el conjunto de García Sanjuán, frenando las acometidas de un bloque local que no tenía las ideas claras a la hora de atacar. Los pitiusos tocaban con sentido en la medular, demostrando calidad pese a ser de una categoría inferior y sin desentonar en ningún momento.
Pero el peligro fue siempre de los locales, con varios avisos poco claros. A los veinte minutos, un robo de Ion Vélez en zona de riesgo acababa en galopada por banda y centro raso que Lizarraga remataba defectuosamente con la zurda en la frontal. El balón se marchó fuera por poco. Poco después, en un saque de esquina, el cabezazo de Lalaguna lo atajaba con seguridad Marcos Contreras.
El encuentro entraba en una fase de imprecisiones y nervios, con poca claridad de ideas hasta que en los diez minutos finales apretaron con fuerza los navarros. Avisaba Íñigo Ros a los 36 minutos disparando alto; y pocos instantes después llegaba la oportunidad más clara de los locales cuando una buena combinación por banda diestra llevaba a Delgado hasta la línea de fondo, con centro raso para que el intento de espuela de Vélez saliera fuera por muy poco. A cinco del intermedio, Marcos Contreras volvía a intervenir con seguridad ante un disparo de Cabezas.
Pero curiosamente, lo que pudo llegar ya con las manecillas en el 45 fue el uno a cero. Entrada por la izquierda de Agus, centro al área que sale rebotado para caer a pies de Javi Rosa, que llegaba en carrera. El lateral empalmó raso, duro, abajo, donde Pagola desvió con apuros y el cuero acabó en el palo. Una verdadera lástima.
Segundo tiempo
La segunda parte fue de control local ante un cuadro pitiuso que se defendió con orden. Óscar Vega tuvo a los ocho minutos la mejor ocasión ribereña, pero su disparo desde la frontal lo enviaba a córner Marcos en un paradón. Desde ahí el equipo de García Sanjuán trató de desplegar algunas llegadas, con una jugada clave como fue una caída de Juanan en el área cuando se llevaba media hora. El colegiado se inhibió de nuevo.
Los locales abrían juego a las bandas, donde los centros de Javi Cabezas y Vega no hallaban rematador. Los isleños tenían cada vez más problemas físicos, pero supieron defender como jabatos, con peligro en dos opciones por arriba de Cabezas y Óscar Vega. Los problemas llegaron para los locales con la lesión del ariete Vélez, que no pudo seguir. Y de cabeza a una nueva prórroga, la tercera copera.
En el tiempo suplementario llegaba primero de todo la polémica expulsión de Piña, tras una acción que no pareció merecedora de roja. Fue el asistente el que ´sopló´ a Baiges y el equipo se quedaba con diez. De ahí hasta el descanso controlaron los locales pero sin riesgo, pues Larra había entrado ipso facto haciéndose el capo de la zaga.
El segundo periodo de la prórroga sí que fue de acoso y derribo de los locales, en especial atacando por el costado derecho. Javi Cabezas probaba con un zapatazo desviado, y dos minutos después, en el cuatro, Iñigo Ros tenía un cabezazo franco que se le marchó fuera a la izquierda de Marcos.
Mucho hacían los rojinegros, ayer de azul de pies a cabeza, aguantando el acoso y achicando balones. A los siete minutos, córner de los navarros y testarazo de Álvaro Corral algo defectuoso, con una nueva intervención de Marcos.
Gol anulado a Chema Mato
Y ya sobre el 120, se anuló un gol a los locales por claro fuera de juego de Chema Mato. Fue el último susto antes de la tanda de penaltis, donde Marcos Contreras empezó como los grandes, parando el primer penalti a Lázaro y el tercero a Íñigo Ros. Aunque Larra marró el suyo, después no perdonaron Lolo ni Juanan para catapultar al equipo a los dieciseisavos. Llegará un Primera, llegará un grande. Mañana se sabrá cuál.
