Mantenerse en la Primera División masculina de balonmano por cuarta temporada consecutiva. Con ese reto empezará el HC Ibiza la Liga este sábado, enfrentándose a domicilio al Almoradí a partir de las 18.30 horas. Los ibicencos tendrán por delante 30 jornadas para evitar el descenso, con el que estarán penalizados los dos últimos clasificados del grupo E. «Nos va a costar mantenernos», explicó Félix Mojón, entrenador de los de Vila.
La temporada pasada sólo bajaba un equipo pero este curso serán dos los descendidos. El aumento de conjuntos participantes -pasando de trece a dieciséis- ha motivado que tengan que caer más a la Segunda División.
Los isleños sufrieron hasta el último momento en el campeonato 2015-16 y esta vez intentarán que la experiencia no se repita. Aunque Mojón apuntó que será «difícil» obtener la permanencia ya que cuenta con una plantilla «muy joven» y les queda mucho trabajo por delante. «El equipo está trabajando muy bien y es admirable el esfuerzo que están realizando los jugadores, pero nos falta mucho, sobre todo en aspectos defensivos», comentó el preparador de los isleños.
«Nos está costando encontrar perfiles defensivos en nuestros jugadores, que tienen casi todos rasgos ofensivos. El sistema defensivo está generando dudas y no está todo lo bien ajustado que debería», admitió Mojón, que también quiere ser optimista. «A medida que vaya avanzando la temporada seguro que vamos a estar mejor. Desde que estoy en Ibiza es el año en el que veo más compromiso en la plantilla», dijo el entrenador.
El preparador gallego cuenta con los refuerzos de Antonio Carreño, Álex Bonilla y Sergi Rullán para apuntalar una plantilla en la que faltarán estiletes de otros años (como Fran Rubio, Santi Maíllo y los hermanos Freiría). La plantilla no está completamente cerrada y no se descarta la incorporación de un central defensivo: «Si aparece un jugador de estas características, bienvenido sea, pero tampoco estamos rompiéndonos la cabeza por encontrar algo. A lo mejor en diciembre sabemos de jugadores que están descontentos en sus equipos», explicó Mojón.
Es el turno de los canteranos del club, de los que prácticamente todos los que forman parte de la plantilla sénior ya han debutado en Primera en cursos anteriores.
Rivales directos
Con estos mimbres, los pitiusos buscarán la permanencia, pelea en la que, según Mojón, sus grandes rivales serán conjuntos como Mora, Mislata, Marni, Vila Real, Puerto Sagunto B y Alcàsser (estos tres últimos son los recién llegados a la categoría). Para el preparador de los ibicencos la clave estará en hacerse fuertes en casa y no dejar escapar puntos como locales, a diferencia de lo que ocurrió la temporada anterior.
El técnico señaló que Agustinos, Elche, Elda y Preter serán los equipos que estarán en la parte alta de la clasificación. El Almoradí, rival al que los isleños se medirán este sábado, es un bloque «de la zona media-alta».
