El día en el que Irene Colomar o Cristina Ferrer decidan colgar los guantes, Fernando Pérez podrá dormir tranquilo. El maño que ha obrado el milagro del kárate en Ibiza, estableciendo una factoría de campeones en el club Samyd, sabe que detrás el relevo está asegurado. Dos promesas que ya se saben realidades sobre el tatami lo volvieron a demostrar ayer.
Víctor Aranguren y Dora Córdoba cerraron la actuación insular en el Campeonato de España sub´21, júnior y cadete consiguiendo dos oros más. Con los metales obtenidos el sábado por Inma Sayagués (oro cadete en menos de 47 kilos) y el dúo de competidores del Karate Do, otro club que está pegando muy fuerte con Juan Manuel Herrera y Marc Torres, bronces en sus pesos dentro del kumite júnior, son cinco las preseas que ha recolectado la delegación pitiusa en su visita a la capital de Andalucía.
Espectacular trayectoria
En el caso de Aranguren, su trayectoria está siendo tan inmaculada que parece increíble de imaginar. El sanantoniense lleva con el de ayer cuatro títulos nacionales seguidos. En 2010 abrió la racha con un oro cadete, siguió en 2010 y 2011 con sendos entorchados como júnior y ha cerrado este cuarteto de oros confirmándose como el mejor entre los pesos pesados del kárate nacional sub´21. «Para 2013 quiero sacar algo a nivel europeo e intentar clasificarme para el Mundial de mi categoría, que se disputará en España», comentó ayer Aranguren, que aspira a hacerse un hueco en el equipo nacional sénior de cara al año entrante.
En Sevilla, el del Samyd se deshizo en primera ronda de Iván Vázquez (Galicia) por 6-2; pasó algún apuro en la segunda criba ante el andaluz Manuel Serrano (7-4), y no tuvo piedad para batir en semifinales a Rubén González. El madrileño se llevó un contundente 8-0 que precedió al 3-0 que valió a Aranguren para colgarse su cuarto oro tras ganar la final a otro rival de la comunidad madrileña.
Por su parte, Dora Córdoba fue pasando rondas de manera más ajustada: un doble 2-0 le sirvió para deshacerse de Silvia Galván (Madrid) y Erika Gil (Euskadi) en las rondas previas y por la mínima se llevó la final ante una competidora de la federación andaluza. «No llegaba con muchas expectativas a esta competición porque no he podido entrenar mucho últimamente al centrarme más en la carrera. Por eso ha sido una gran alegría. Ahora mi reto es entrar en la preselección del Campeonato de Europa del próximo febrero», explicó la ibicenca, que estudia en Sevilla y estuvo apoyada en la grada por varios de sus compañeros del grado de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte que está cursando en la ciudad hispalense.
