Teo Blázquez lo tenía claro desde el pasado 23 de octubre y se ha mantenido en sus trece. El director técnico del programa de seguimiento de judo comentó en la reunión que tuvieron aquel día los representantes de los nueve centros deportivos que subvenciona el Consell de Ibiza con Rafa Triguero, conseller de Deportes, que no pensaba justificar «ni un solo gasto» del presente año «al no haber realizado trabajo de tecnificación». Al tomar esta decisión, Blázquez no podrá ingresar los 9.618 euros que le había concedido la conselleria. Esa cantidad no se reinvertirá en tecnificación. Tal y como apuntan desde la institución, tampoco irá destinada, en principio, a otra área del departamento deportivo, quedando su uso final a cargo de la conselleria de Economía.
Según el preparador, su renuncia se debe a la tardanza de la máxima institución insular para dar salida a esta iniciativa. Diez meses pasaron entre la presentación del proyecto en enero y su resolución, en el Consell Executiu del 22 de octubre. Es decir, casi cinco desde la publicación de las bases en el Butlletí Oficial de les Illes Balears, el pasado 3 de mayo. Blázquez afirma no haberse arriesgado a «funcionar como centro de seguimiento durante 2012» sin saber el dinero que podría manejar para planificar el curso.
«No se puede trabajar si nos anuncian a finales de octubre la cantidad con la que vamos a contar y nos piden que justifiquemos facturas de nuestra actividad para el 15 de noviembre. No hemos viajado ni hemos comprado material. Hemos entrenado, pero sin hacer ninguna concentración especial. Por eso no había nada que justificar», comentó Blázquez. En estas últimas tres semanas, el responsable del judo tampoco ha querido facturar gastos en equipamiento para cubrir la subvención otorgada por el Consell.
Diferentes formas de declarar
Las otras ocho federaciones sí que presentaron facturas y nóminas por actividades realizadas durante los últimos diez meses y medio. A diferencia del judo, los centros de seguimiento que ya existían en la legislatura progresista (tenis de mesa, piragüismo, kárate, natación y tiro con arco) han seguido haciendo concentraciones de tecnificación, pese a la incertidumbre de no saber las cifras en las que se moverían las subvenciones del Consell. Además, las ‘academias’ de bádminton, atletismo y lucha olímpica -que ingresan en el proyecto- también han justificado las reuniones interclubes que han llevado a cabo este año para subir el nivel de su cantera.
De esa labor, en definitiva, salen las retribuciones de los técnicos que han trabajado con los 90 deportistas a los que beneficia el programa. En todos los casos, excepto el del piragüismo, esta partida se ajusta al 40% que puso el Consell como límite de gasto en preparadores. Para llegar al cien por cien de las subvenciones, la mayoría han optado por la compra de material. Destacan en ese apartado los desembolsos del 55% que ha hecho el bádminton (3.589 euros, principalmente en volantes); el 60% que ha invertido la lucha olímpica (5.049 euros destinados a pagar el acondicionamiento de una sala de Sa Blanca Dona para practicar este arte marcial), o el 85% que ha reservado el piragüismo (el C.N. Sant Antoni ha comprado cinco embarcaciones por 3.503 euros). Con ese dinero adelantado, las delegaciones tendrán que esperar a que el Consell cumpla el plazo que ha dado para pagar: marzo o abril de 2013.
Viajes: El apartado más difícil para poder justificar
Los responsables de los centros de seguimiento coinciden en señalar que acudir a torneos y competiciones fuera de la isla es la actividad que añade un plus al rendimiento del deportista canterano.
Básicamente, lo que se suele denominar popularmente como el saber competir. Sin embargo, Rafa Triguero ha aclarado en varias ocasiones (entre ellas, en la rueda de prensa en la que se presentó a las nueve disciplinas escogidas) que esta línea de ayudas «no tiene como objetivo pagar viajes». En las bases, quedan excluidos los desplazamientos a campeonatos del Mundo, Europa, España o Balears, ya que son las federaciones las que se deben encargar de financiarlos.
Por esa razón, justificar viajes ha sido muy complicado para algunos programas de seguimiento, añadiendo además el ‘handicap’ de que las facturas tenían que estar emitidas a cargo de la delegación y no de los clubes. Eso ha impedido incluir partidas de desplazamientos al piragüismo o a la lucha olímpica. Otros como el kárate (que ha destinado a este concepto una cantidad sin determinar por haber comprado en las últimas semanas pasajes para acudir en diciembre a una concentración en Mallorca), tenis de mesa (que se endeudó como centro de seguimiento pese a desconocer la ayuda con la que contaría) o atletismo (que también acudirá a concentraciones fuera de Ibiza antes de que acabe el año) han encontrado una fórmula válida de justificación.
La natación también ha incluido viajes, que acometieron los clubes, principalmente, para hacer entrenos en piscinas de 50 metros fuera de la isla. Al no poderlos incluir de esta manera en la memoria de gastos, las formaciones han emitido una factura de sus gastos a nombre de la Federación Balear, documento que presentaron ayer al Consell. La próxima semana se reunirá la Comisión Técnica de los programas, que debe dar el visto bueno a las justificaciones antes de que pasen a los interventores.
