«No valen excusas, es una eliminatoria decisiva y tenemos toda la ilusión del mundo por superarla. Hay que dejarse la vida». Así, con este espíritu positivo y totalmente optimista, afronta el entrenador de la Peña Deportiva, Luis Rueda, el encuentro que su equipo jugará el próximo domingo, a las 11,30 horas en el campo municipal Juan Rojas –de césped natural– contra el Almería B, en el que será el encuentro de ida de la primera eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B.

En opinión del técnico del conjunto santaeulariense el partido es «a cara o cruz» y quiere dejar claro que no será fácil superar esta primera ronda porque su equipo está «mermado» por las muchas bajas que tiene y que se acumulan a las que arrastra el equipo prácticamente desde el pasado mes de enero.

La Peña de Santa Eulària no podrá alinear el próximo domingo a siete jugadores porque están lesionados. Son Berto, Fofi, Gavilán, Raúl Salas, Carlos López, Rubén Navarro y Rubén Martínez. No hay, sin embargo, ningún futbolista sancionado.

Para Rueda, el potencial de su equipo «ha bajado» por culpa de las lesiones, pero no quiere que sirva de excusa. «Es cierto que las bajas nos obligarán a buscar combinaciones en la alineación, pero no quiero ningún tipo de pretexto para no ir a por el triunfo».

Ayer toda la plantilla comió en un restaurante en Santa Eulària para festejar el subcampeonato y a partir de ahora sólo se pensará en el filial almeriense.

Hay que señalar que el periódico Almería Actualidad publicó ayer que el Almería B tuvo «relativamente suerte» al quedar emparejado con la Peña porque «hay que tener en cuenta que el grupo IX es mucho más duro en lo que se refiere a competitividad».

Por su parte, el Ideal de Almería reflejaba que la Peña era «todo un hueso», que era un conjunto que encajaba muy pocos goles, y hasta hizo promoción turística de la población pitiusa al escribir que Santa Eulària es «una bellísima localidad ibicenca».