Hoy en día, educar a nuestros hijos es bastante fácil, solo tenemos que darles acceso a una pantalla y ya está. ¡Qué cansadas son las huelgas y qué aburridos estamos de las manifestaciones! ¡Callémonos y acatemos! Para mí, no gracias; uno de los valores que transmitiré a mis hijos es que hay que luchar por un mundo mejor y que tienen derechos para llegar a ello y que el camino no es fácil.