Ante la huelga indefinida de profesores en Baleares, de las cuatro partes afectadas por el conflicto (profesores, padres, alumnos y Govern) ninguna gana, pierden todos. En pocas palabras, expondré las razones de unos y otros por las cuales es nefasta la situación. Alumnos: sujeto por y para el cual se hace la huelga. No comienza el curso con normalidad y tranquilidad para recibir la formación necesaria para su futuro.

Padres: están hartos de una situación que les agobia y que en casos de Infantil y Primaria les obliga a redoblar los esfuerzos necesarios para poder educar a sus hijos. Profesores: afrontan pérdidas económicas por un futuro mejor para los alumnos y, además de perder dinero, pierden crédito de cara a algunos padres intransigentes o mal informados. Govern: su imagen ante la opinión pública se deteriora y no sólo ante profesores rojos (ya poco amigos de votarlos), sino ante votantes propios, que lo ven como déspota, soberbio, incapaz de hablar con la comunidad educativa y con un estrategia clara de dejar caer la huelga por aburrimiento de padres y profesores, al mismo tiempo que llena las arcas públicas con el dinero de los huelguistas (100 euros diarios aproximadamente).

La solución está en sentarse en una mesa y dialogar y dialogar hasta encontrar un punto en el que nadie se sienta vencido ni vencedor, y acabar de una vez por todas con esta huelga que machaca a la sociedad balear.