Soy una paciente que por ciertos motivos tengo que acudir con mucha frecuencia al Centro de Salud de San Antonio, especialmente a urgencias, y me siento con la necesidad de comunicar el trato tan exquisito que recibo cada vez que lo necesito. Creo que nosotros los pacientes no somos capaces de reconocer y agradecer el comportamiento que observan todos en general con nosotros.

Un caso muy reciente: permanecí en urgencias varias horas y todo el personal fue estupendo, pero en especial una doctora (de nombre Suleyka), quien, como el trabajo no acuciaba, permaneció tres horas a mi lado porque comprendía que, de ese modo, como mi mejoría era costosa, lograríamos conseguirlo.

Esto se tiene que saber. Que tendrán sus fallos, pero el trato es sumamente respetuoso y con mucho cariño, y por tanto quiero que se sepa que no todo es malo. Estoy sumamente agradecida a todos.