Quiero explicar muy sintéticamente la situación del Bàsquet Sa Real respecto al Polideportivo Joan Pau II, pues las informaciones vertidas en la prensa no son fieles a la verdad y están causando muy mal ambiente en el centro educativo que dirijo.

1.– El Bàsquet Sa Real, hoy por hoy, no es lo mismo que el Colegio Sa Real, sino una entidad deportiva independiente.

2.– El curso pasado el Bàsquet Sa Real utilizó las pistas del Polideportivo en virtud de un acuerdo firmado con el Obispado y pagó un precio por el uso que no cubría ni los gastos que generaban. Más de 3.000 euros que pagó el colegio y que no pudo destinar a otras cuestiones necesarias para todos los alumnos (no todos juegan a básquet).

3.– A la hora de firmar el convenio de este año, el Obispado pidió que se aumentara la aportación del Bàsquet Sa Real hasta cubrir estrictamente los gastos que generaba, pero el Bàsquet no pudo, no supo o no quiso aceptar el precio, que se revisó a la baja, lo que supone nuevamente asumir el centro un gasto que no le es propio.

4.– En la última propuesta de convenio se matizaron algunas cuestiones de uso (no de precio) del polideportivo que pretendían dar más margen al centro para recuperar el déficit que generaba al básquet, alquilándolo puntualmente o con actividades propias.

5.– A algunas de las principales dificultades que presentaba el texto para el Club de Bàsquet Sa Real se le dieron solución, fuera del convenio, mediante acuerdo con el director, que siempre ha intentado poner las cosas fáciles a esta entidad deportiva que tiene una estrecha relación con el colegio (por ejemplo, el uso en horario extraescolar de 17 a 18:30 horas, sin coste adicional).

6.– El Club no quiso aceptar el texto del convenio y tanto se estiró la cuerda que se ha roto.